TERTULIAS/CHARLAS SOBRE COACHING EMANCIPADOR EN EL CÍRCULO DE COACHING ESPECIALIZADO.



Periódicamente nos reunimos en "petit comité", con un aforo máximo de 10 personas, para debatir sobre COACHING EMANCIPADOR.
Son diálogos participativos para realizar una "iniciación" en la disciplina del coaching adaptada a tu universo de sueños.
Si estás interesada/o en participar GRATUITAMENTE deja tu reserva en paco.bailac@salaidavinci.es y te informaremos de los calendarios previstos.

¡¡¡Ven te esperamos!!!



¿TRABAJAS POR VOCACIÓN O POR DINERO?


El amor no es consuelo, es luz.
Nietzsche

Busquemos nuestra Vocación profesional
BORJA VILASECA

Primero debemos averiguar qué es lo que despierta nuestra pasión y potencia el talento oculto. Después, el sentido profesional se consigue aportando valor añadido a través de una función que sirve y enriquece a la sociedad.
Nos guste o no, formamos parte de una sociedad edificada sobre un sistema monetario que nos obliga a competir entre nosotros para ganar dinero. Es el precio que pagamos para saciar nuestras necesidades básicas y otras que nos vamos creando. Y hasta que no cambien las reglas del juego, el trabajo va a seguir protagonizando nuestra rutina diaria.

“Cuando la profesión se desempeña para satisfacer necesidades personales, muchos piensan que lo que hacen no tiene sentido”
“El verdadero éxito implica hacer lo que amamos, amar lo que hacemos y concebir la profesión con vocación de servicio”

Muchos historiadores coinciden en que se trata de una nueva forma de esclavitud, mucho más refinada que la de épocas anteriores. Según el portal de ofertas de empleo Monster, el 15% de la población activa española dedica más de 50 horas semanales a su profesión, el 50%, 40 horas; el 25%, entre 25 y 40 horas, y el 10% restante, menos de 25 horas. Todo ello sin contar horas extra, el tiempo destinado a comer o los desplazamientos.
Sin embargo, estar en el trabajo no es lo mismo que estar trabajando. Al ser tratados como máquinas sin necesidades ni sentimientos, la gran mayoría de españoles sufre su jornada laboral de cuerpo presente y mente ausente. Pero quien se desconecta de su corazón durante tantas horas, tantos días a la semana y tantos meses al año, corre el riesgo de convertirse en un autómata que existe, produce y consume por pura inercia.

LA MONOTONÍA COMO SÍNTOMA

"El infierno es despertar cada día
y no saber qué haces aquí"
(Frank Miller)

Dado que en nuestra sociedad todavía prevalece el paradigma "del tener y del hacer", en general consideramos que lo importante es "lo que tenemos", no "lo que somos". Y esta creencia condiciona "lo que hacemos". Para muchas personas, el trabajo absorbe gran parte de su tiempo y energía; y se margina el resto de las dimensiones de la vida en pos del dinero, la respetabilidad, el poder y la fama.
Para otros, estas metas externas no forman parte de sus prioridades cotidianas, con lo que en vez de vivir para trabajar, trabajan para vivir. Sus motivaciones laborales consisten en garantizar su seguridad y estabilidad económicas; perciben el trabajo como un trámite para pagar sus facturas. De ahí que se interesen, sobre todo, en la cantidad que cobran a final de mes, así como en el horario a cumplir.
En los dos casos, la función profesional se desempeña como un medio para satisfacer necesidades y deseos personales. Apenas se tiene en cuenta la finalidad de dicha actividad en su relación con el resto de seres humanos y el entorno medioambiental del que todos formamos parte. Al negar su parte trascendente -la que va más allá y a través de cada individuo-, muchos terminan por reconocer que lo que hacen no tiene sentido.
Y dado que el trabajo ocupa casi un tercio de la vida, terminan por llevarse el malestar a casa. Los psicoterapeutas contemporáneos lo denominan "vacío existencial", y se caracteriza por experimentar la vida como algo gris, monótono e insípido. De ahí que triunfe la cultura del entretenimiento -encabezada por la televisión-, que permite que la sociedad pueda saciar su necesidad de evadirse de la realidad en todo momento.
LA DECADENCIA DEL EGOÍSMO
"Quien sigue al rebaño acaba pisando excrementos"
(Darío Lostado)

El cambio y la evolución son lo único que prevalece con el paso del tiempo. Sin embargo, los seres humanos nos resistimos constantemente a este fluir natural de la vida. Prueba de ello es la manera en la que nos estamos enfrentando a la crisis financiera actual, que para muchos expertos pone de manifiesto una crisis mucho más profunda, relacionada con nuestro estilo de vida, nuestras creencias, nuestros valores y nuestra inconsciencia.
Al hablar de "crisis" solemos obsesionarnos con aquello que escapa a nuestro control, permitiendo que nos invada la incertidumbre, el miedo y la inseguridad. Con ello fortalecemos nuestro arraigado sentido de conservación e inmovilidad existencial. Así, en vez de ver e interpretar la crisis como nuestra enemiga, hemos de comprender que se trata de un proceso totalmente necesario: es el escenario donde se fraguan las transformaciones que nos permiten seguir creciendo individual y colectivamente. De ahí que sea mucho más eficiente ver la situación actual como una oportunidad para atrevernos a cambiar y evolucionar como personas y, en consecuencia, como profesionales.
Se dice que el maestro aparece cuando el discípulo está preparado. Es decir, que las cosas suceden justo cuando tienen que suceder. Como sociedad, poco a poco estamos tomando conciencia de la insostenibilidad del sistema, así como de la decadencia de la filosofía y los valores imperantes, basados en el individualismo, en el egoísmo, en trabajar solamente para nuestro propio beneficio (y el de los nuestros) sin importarnos todos los demás... Por más que nos resistamos y nos aferremos al pasado, es hora de cambiar en el presente para alinearnos con el futuro que viene.
Algunos economistas aseguran que se avecinan cambios y transformaciones imparables e irreversibles. Nos estamos acercando al despertar de un nuevo paradigma basado en "lo que somos", relegando a un segundo plano "lo que tenemos". Y las consecuencias de este salto evolutivo se verán reflejadas precisamente en "lo que hacemos".
Los sociólogos, por su parte, afirman que el puente entre estas dos maneras de pensar, de ser y de actuar se construirá por medio de la responsabilidad y el liderazgo personal. Aunque nos hayan hecho creer que somos víctimas de nuestras circunstancias, y que lo mejor que podemos hacer es conformarnos para evitar nuevas frustraciones, en última instancia gozamos de libertad para tomar decisiones y elegir conscientemente nuestro camino en la vida.

DEL TENER AL SER
"Se ríen de mí porque soy diferente. Yo me río de ellos porque son todos iguales"
(Kurt Cobain)

Para saber si estamos preparados para encarnar el cambio que queremos ver en el mundo, los psicólogos y coachs especializados en orientación profesional suelen formular las siguientes preguntas: ¿Cómo te levantas y encaras los lunes por la mañana? ¿Lo haces con vitalidad, entusiasmo y alegría? ¿O más bien con desgana, frustración y resignación? ¿Disfrutas de tu profesión y das gracias por poder desempeñarla? ¿O sueles quejarte y lamentarte por tus actuales condiciones laborales, deseando que llegue el viernes cuanto antes? ¿Sueles mirar el reloj mientras trabajas? ¿O más bien pierdes por completo la noción del tiempo?
Entre otras cuestiones, estos expertos también promueven otro tipo de reflexiones, interesándose por aspectos más intangibles y relevantes: ¿Tu profesión ayuda y beneficia realmente a otros seres humanos? ¿Atiende y cubre alguna de sus necesidades básicas? ¿Tiene algún sentido lo que haces? ¿Qué es lo que te retiene en tu actual puesto de trabajo? ¿Qué perderías si lo dejaras? ¿Y qué ganarías si te atrevieras a abandonarlo? Y por último y tal vez más importante: ¿Qué harías si no tuvieras miedo?

EL SENTIDO DEL TRABAJO

"La vida nos exige una contribución, y depende de cada uno de nosotros descubrir en qué consiste" (
Viktor Frankl)

Aunque no es nada fácil enfrentarse a uno mismo, cada vez más seres humanos están siendo coherentes con las respuestas que obtienen en su interior. De ahí que se esfuercen en concebir su función laboral como una oportunidad para contribuir con su granito de arena en la evolución consciente de la humanidad. Desean construir valor a través de sus valores, y disfrutar de otro tipo de riquezas menos materiales creando riqueza real para la sociedad.
Muchos han descubierto que no hay nada más gratificante que poder ofrecer, dar, servir y contribuir de una u otra forma a mejorar la vida de los demás. Y es precisamente este poder el que andan buscando. Más allá de concebirse como un fin en sí mismos -dando lugar a la peligrosa enfermedad del "egocentrismo"-, parte de su profesión consiste en "trabajarse a sí mismos" para ser medios al servicio de los demás. Sólo así es posible despertar y potenciar el altruismo que anida en lo más profundo de cada corazón humano.
Eso sí, para poder ejercer nuestra profesión con este sentido trascendente, primero hemos de descubrir quiénes somos (cuál es la verdadera esencia que se oculta tras la máscara que nos ha sido impuesta por la sociedad); qué nos hace vibrar (qué materias o áreas de la realidad nos ilusionan y apasionan), y por último, qué formación -tanto académica como autodidacta- podemos adoptar para potenciar nuestras virtudes y nuestros talentos innatos.
REDEFINIR EL ÉXITO

"¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo si pierde su alma?"
(Mateo 16:26)

El objetivo de este autoconocimiento y desarrollo personal es dar lo mejor de nosotros mismos a través del ejercicio de una profesión útil y con sentido, lo que a su vez repercute directamente sobre nuestro bienestar emocional. Ya lo afirmó el filósofo Voltaire: "He decidido hacer lo que me gusta porque es bueno para mi salud". Para lograrlo, hemos de echar un vistazo al mercado y ver qué podemos aportar en este momento a la sociedad. Así, el cambio de paradigma que surge al descubrir y alinearnos con nuestra verdadera vocación profesional consiste en concebirnos como lo que en realidad somos, la "oferta", y no la "demanda", como tan acostumbrados estamos a vernos.
La finalidad de este viaje hacia dentro es redescubrir qué es para cada uno de nosotros el "éxito". Según los dos filósofos más destacados del management actual -Steven Covey y Fredy Kofman-, en la nueva economía que se avecina el verdadero éxito implicará tres cosas: "hacer lo que amamos" (estrechamente relacionado con lo que somos en esencia, de ahí que nos apasione y nos haga vibrar), "amar lo que hacemos" (vivir nuestra función con coraje, compromiso y entusiasmo, lo que depende, sobre todo, de la actitud) y concebir dicha profesión con "vocación de servicio", siendo muy conscientes de que la auténtica felicidad brota de nuestro interior al hacer felices a los demás. De ahí que el poeta y filosofó hindú Rabindranath Tagore expresara que "quien no vive para servir no sirve para vivir".

EL ÉXITO MÁS ALLÁ DEL ÉXITO

Lo paradójico de las personas que han logrado alcanzar el denominado “éxito más allá del éxito” –ser felices en todas las áreas de su vida, incluyendo, por supuesto, la dimensión profesional– es que no conciben su función laboral como un trabajo. Más bien la disfrutan como algo que forma parte de lo que son, alegando que no podrían hacer otra cosa en la vida. Además, al dedicarse a lo que les gusta y apasiona, inevitablemente lo hacen mejor que la mayoría, poniendo toda su imaginación, creatividad y entusiasmo al servicio de una actividad necesaria, útil y llena de sentido. De ahí que a medio plazo reciban como recompensa un salario más que digno, el cual ya no es el centro y el objetivo de sus vidas.
Fuente: El País

20 comentarios:

ROSA dijo...

Como siempre un buen post para la reflesión y para aprender.

¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo si pierde su alma? Es una hermosa pregunta.

Yo trabajo porque lo necesito, pero mi trabajo lo desarrolllo con mucho entusiamo y me es muy grato, es una forma de estrechar lazos con las personas.

Un besito Rosario

Belkis dijo...

Paco, tus posts como siempre invitan a revisarnos, a estudiarnos, a interiorizar situaciones de nuestra vida para mejorarnos.
Mi vocación es el servicio a los demás, y aunque trabajo, en primer lugar porque necesito el dinero, también desarrollo un trabajo en el que ofrezco un servicio y ayudo a resolver problemas y eso me produce satisfacción y lo realizo con entusiasmo y entrega. Siempre pongo el alma en todo lo que hago.
Si no estuviera realizando este trabajo seguramente estaría en alguna institución donde pudiera ayudar a las clases desfavorecidas, a los indigentes, a las mujeres maltratadas, a los niños productos de hogares conflictivos, a presos durante procesos de reinserción social, a ancianos, a adictos a las drogas, en fin, ayudar a la gente a mejorar sus vidas.
Realmente no estoy haciendo lo que más amo, pero si he cambiado mi actitud y he logrado amar lo que hago. Afortunadamente no estoy pendiente del reloj esperando la hora de salir corriendo, salvo algunos días, en que como a todos los humanos, el cansancio puede mas que todo el amor del mundo.
Un fuerte abrazo y que tengas una linda semana!!!!

Inés dijo...

Paco, tu blog y todos tus posts tiene mucho rigor, gracias por las referencias, menudo trabajo de estudio y esfuerzo por dar y ofrecer lo mejor.

me parece el eterno conflicto, son pocos los afortunados de poder desarrollarse en lo que les gusta, muchos aún no saben cual es su propósito en la vida y esto es lo que provoca y desencadena un sinfin de reacciones en cadena hacia la infelicidad.

muy buenos tus posts.
te sigo con mucho cariño, lo sabes, gracias por tus palabras que siempre espero.

Juan José López JARILLO dijo...

¿Es /son incompatible (s) la vocación con el dinero?

Vicky Cateura dijo...

"No me gusta trabajar, odio tener que madrugar cada mañana, no soporto al jefe, y me molesta tener que aguantar las miserias de la gente por un miserable puñado de monedas, en lugar de andar libre por ahi haciendo lo que más me gusta hacer NADA..."

Algo así es la letra de una canción, cualquier parecido con la realidad será pura coincidencia, pero no pude resistirme a escribirlo, espero perdoneis ese toque de humor.
Ahora en serio, tengo la suerte y el privilegio de hacer lo que quiero y lo que me gusta, y realmente no lo hago por el dinero, puesto que lo que nos ingresan a final de mes más que un sueldo se parece a una propina, aunque eso si, que no nos falte.
Si alguien trabaja en sanidad seguro que lo entiende, la nuestra no es una profesión, es una vocación, y contrariamente a lo que muchos puedan pensar, se aprecia la diferencia entre quienes la ejercen como una cosa o como otra.
Saludos a todos

roxana dijo...

Hola Paco, lo estaba leyendo y me dije pero si lo lei en el !pais! excelente articulo, Aunque vivo en la Argentina recibo los fines de semana el diario "el Pais" en casa, para saber un poco de Europa y por eso lo tenia en mi cabeza, muy bueno!!!!!
Un abrazo, tus entradas son todas para guardar!!!!!!!!!!!!!!!!
Gracias por tus bellas palabras en mi blog, es un gusto!

alicia alvarez dijo...

Buenas noches paco, Yo trabajo por necesidad como todos los seres humanos y el que lo niegue miente, si es cierto que lo puedes hacer con mejor o peor agrado, con mejor o peor dedicación, pero hacerlo.

El trabajo es muy importante para el estimulo humano, nos hace relacionarnos con otros seres humanos , así como valorarnos, respetarnos, sentirnos útiles ante la sociedad, sea remunerado o no, el trabajo es importante.

Un granito de cada uno hace una montaña.

Besos paco y bona nit desde barcelona.

Muy buen post.

hatoros dijo...

QUERIDO TOCAYO LAS COMPLICACIONES DE LA VIDA SON TODAS POR NO ESTAR DONDE DEBÍAS ESTAR EN EL MOMENTO ADECUADO
A PARTIR DE AHÍ HAY MUCHAS DIFERENCIAS
UN ABRAZO

Palma da Mão dijo...

Olá Paco, meu amigo, belissima questão, se se trabalhasse por vocação, mesmo esta aliada à necessidade, viveria-mos tão mais felizes, pena que muitos de nós, simplesmente não o possam fazer ou não o consigam fazer pelas mais variadas razões:(
Beijinhos

Paco Bailac dijo...

ROSARIO bendito el trabajo cuando dignifica...

saludos

Paco

Paco Bailac dijo...

BELKIS seguro que en tu trabajo proyecta mucho amor, mucho..


Paco

Paco Bailac dijo...

INES....... que amable eres.....
Ven mucho a la tertulia... un saludo

Paco

Paco Bailac dijo...

JUAN JOSÉ...

Eso queda a tu interpretación.....

un saludo

Paco

Paco Bailac dijo...

I AM

¿a que hora te levantas?


Paco

Paco Bailac dijo...

ROXANA..


Gracias por interesante por la cultura.....propucida...desde España.

Un saludo

paco

Paco Bailac dijo...

ALICIA....


Me alegra verte de nuevo por la TERTULIA.
Hemos notado a faltar tu presencia...

Un abrazo

paco

Paco Bailac dijo...

Un abrazo... HOTAROS..

Paco

Paco Bailac dijo...

Palma tenia "saudade de ti"
Un abrazo

Paco

ॐ Palabras Andantes dijo...

un abrazo Paco, estoy viniendo a leerte, no siempre dejo comentarios, pero quería que sepas que no me olvidé de ti, ni de tu blog.
que pases un lindo día

Paco Bailac dijo...

Palabras Andantes...

Ni yo tampoco.... se sigo y me gesta verte.

Un abrazo.


pacobailacoach.blogspot.com