¿ESTAMOS OBESOS DE CONFORMISMO?

MIEDO versus VALENTÍA

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Esta extraña obesidad (la del conformismo) ya no es la de una grasa de protección ni la neurótica de la depresión. No es la obesidad compensatoria del subdesarrollo. Es un modo de desaparición del SER.

Ya no hay límite, ya no hay trascendencia: es como si el cuerpo ya no se opusiera a un mundo exterior, sino que intentara digerir el espacio en su propia apariencia.

Referencia: Jean Baudrillard

Conviene explicar que el miedo produce un triple estrechamiento de la conciencia:

1) Corporal: Se experimenta en el cuerpo como una vivencia opresiva.

2) Psicológica: El mundo sólo se ve como un lugar de amenazas. Hay esclavitud de la atención, que está siempre pendiente de la amenaza.

3) Conductual: Todas las energías se concentran en un único objetivo; estar en alerta máxima, presto a huir, o realizar los rituales que liberan momentáneamente de la angustia.

Hay miedos innatos y miedos adquiridos. Los innatos serán aquellos provocados por desencadenantes no aprendidos, por ejemplo el susto.

No todos los miedos de una especie aparecen al mismo tiempo, surgen y desaparecen a medida que el individuo crece y se desarrolla.

No podemos olvidadar que la gran parte de nuestros miedos son adquiridos.

¿De dónde proceden entonces las diferentes sensibilidades al miedo? Sin duda de la experiencia.

Referencia: José Antonio MARINA