TERTULIAS/CHARLAS SOBRE COACHING EMANCIPADOR EN EL CÍRCULO DE COACHING ESPECIALIZADO.



Periódicamente nos reunimos en "petit comité", con un aforo máximo de 10 personas, para debatir sobre COACHING EMANCIPADOR.
Son diálogos participativos para realizar una "iniciación" en la disciplina del coaching adaptada a tu universo de sueños.
Si estás interesada/o en participar GRATUITAMENTE deja tu reserva en paco.bailac@salaidavinci.es y te informaremos de los calendarios previstos.

¡¡¡Ven te esperamos!!!



¡¡¡SIN RIESGO NO HAY PROGRESO!!!



Sin zona de confort no hay seguridad. Sin riesgo no hay progreso. 

Sin error no hay aprendizaje. Sin satisfacción no hay recompensa que nos motive e inspire a empezar de nuevo el proceso. Así, los cuatro círculos son necesarios y debemos cultivar todos ellos. LA DIFERENCIA “Las maravillas de la vida se nos escapan por la cómoda trampa de la rutina” ( John Nigro) La mayoría de nosotros nos enfrentamos a desafíos de vez en cuando y hay largos periodos de, digamos, relativa tranquilidad. ¿Qué hacer para estar preparados para cuando llegue el momento de salir de la zona de bienestar? La respuesta está, paradójicamente, en la rutina. Es decir, en introducir pequeños cambios en todas aquellas cosas que hacemos casi automáticamente. Lo importante es hacerlo con una actitud también diferente, mostrándonos interesados, ignorantes, interrogativos e implicados. Es decir, abrir la mente, hacernos preguntas, abandonarnos a la CAPACIDAD DE SORPRESA “La sorpresa es el móvil de cada descubrimiento” (Cesare Pavese) El famoso Mihaly Csikszentmihalyi, uno de los padres de la psicología positiva, define la capacidad de sorpresa como uno de los grandes rasgos de la personalidad creativa. Para ser capaces de asombrar a los demás, antes debemos ser capaces de sorprendernos a nosotros mismos. Y sorpresa y creatividad son músculos que podemos entrenar, desarrollar y fortalecer. Todo lo expuesto hasta el momento no tendrá casi efecto en nosotros y en nuestra vida si no somos capaces de maravillarnos. El puro hecho de cambiar de camino para ir al trabajo no tiene ningún valor si no nos obligamos a encontrar durante el trayecto algo que nos sorprenda. Y para ello debemos estar conectados y atentos, observar con una mirada primeriza.
Csikszentmihalyi propone un ejercicio que deberíamos hacer como mínimo dos veces por semana: ser capaces de maravillarnos de algo y ser capaces de sorprender a alguien a lo largo del día. Solo una vez, pero en las dos direcciones. Este ejercicio nos obliga a pensar distinto, a hacer cosas de una manera diferente y a estar conectados con nuestra atención y nuestro asombro. Además de permitirnos entrar y explorar nuestras zonas de riesgo, error y satisfacción. Es gratis. Es sencillo. Y es muy divertido

0 comentarios: