TERTULIAS/CHARLAS SOBRE COACHING EMANCIPADOR EN EL CÍRCULO DE COACHING ESPECIALIZADO.



Periódicamente nos reunimos en "petit comité", con un aforo máximo de 10 personas, para debatir sobre COACHING EMANCIPADOR.
Son diálogos participativos para realizar una "iniciación" en la disciplina del coaching adaptada a tu universo de sueños.
Si estás interesada/o en participar GRATUITAMENTE deja tu reserva en paco.bailac@salaidavinci.es y te informaremos de los calendarios previstos.

¡¡¡Ven te esperamos!!!



el lenguaje de la liturgia



Las belleza de la liturgia.
Como culto comunitario, toda manifestación de amor hacia la emancipación la embellece y dota de un enigmático misterio de belleza colectiva espiritual.
Desde ella  nos disponemos a disfrutas de un banquete de sentidos donde obtenemos el estímulo de una mente que estudie, unos oídos que escuchen, unos ojos que miren, una boca que cante y un corazón que ame.
Así, la emancipación, toma forma de carne humana y desde esa gracia que obtenemos una proyección que nos aleja de la caverna simbolizada en la “cueva” del nacimiento.
Todos somos niños que A travÉs de la evolución ADQUIRIMOS LA CANDICIÓN DE HUMANO MÁS O MENOS CON CAPACIDAD ESPIRITUAL QUE NOS PERMITE ENCARNARNOS EN UN CICLO DE VIDA ACAPTANDO LA MUERTE.

FELIZ NAVIDAD







¡¡¡MUCHÍSIMA FELICIDAD CONQUISTADA Y NO REGALADA!!!






NADA SE HACE SIN QUE ANTES SE IMAGINE




"Nada parece tan verdadero que no pueda parecer falso"

Por inferir definimos es la capacidad para sacar
una consecuencia o deducir algo de otra cosa.
Inferir nos permite sobrevivir dado que nos
posibilita analizar el entorno.
Sin esta capacidad tendríamos serias dificultades
para tomar decisiones, nos eternizaríamos
analizando toda clase de variables.
Pero también, deducir, tiene un riesgo.
Deducimos, básicamente, analizando un
número limitado de datos sin contemplar
otras opciones que podrían ser más
beneficiosas.
Lo que ocurre es que seleccionamos unos
pocos datos de la realidad renunciando a un número
infinitamente mayor de elementos,
pero al hacerlo creemos que aquello que
hemos seleccionado es todo lo que hay.
Aquello a lo que no hemos prestado atención
simplemente parece no existir.
La realidad, para nosotros, es sólo lo que
percibimos. Y este error cognitivo está en la
base de muchas dificultades conversacionales
y, por tanto, en la selección
de los datos que analizamos para
determinar una realidad.
Así, atención, con la escucha no dar
juicios sólo con los primeros cuatro
datos que nos llegan en un momento.
Dar, el justo, protagonismo al tiempo.....
¿te parece?

¿VAS POR CAMINO O SENDERO?




¡PARA QUÉ TE ESCONDES?

Un camino hacia la plenitud es la humildad. Se hace necesario abandonar la soberbia del YO para comprender que son los otros, y no el pasaporte, quién nos da la identidad.
Sin los “otros” ¿Qué importa como te llamas ni de donde vienes?..... Y claro está…”los otros” te consideran según los trates.
Vivir en “guetos” exclusivos solo te servirá de refugio y al no existir para el prójimo simplemente no existirás.
Hay un sueño que vive en mi corazón y que se alimenta cada día más y más. Pero el viento sopla contra mi y quiere debilitar mi alma.
Cierro, entonces, los ojos por un momento para ver, imaginar el sitio donde un día estaré; y mientras piense arde el corazón regenerando mis fuerzas para alcanzar mi destino; pues nada puede quitarme aquello que me tiene guardado la Emancipación,

¿SOMOS NUESTROS?




¿SOMOS?
Evitamos el momento, lo aplazamos. No nos engañemos: a veces es necesario sincerarnos con nosotros, hacernos buenas preguntas, barajar todas las opciones…. Y ser.

Somos la suma de todas nuestras decisiones anteriores. El día de hoy es un resumen de todas las decisiones que tomamos ayer y anteayer. Cuando alguien se pregunta: “¿Cómo he llegado a esto?”, debería repasar la larga lista de elecciones que ha tomado en los últimos años. Y quien se pregunte: “¿Cómo será mi vida en el futuro?”, debería examinar las decisiones que toma de hoy en adelante. Como dice el adagio: una cosa lleva a otro. Por todas estas razones, aprender a tomar decisiones es una habilidad fundamental en la vida que puede aprenderse.
Con cada decisión, la vida toma una dirección, se bifurca, se desdobla; por eso, decidir genera temor. Miedo a equivocarse. Así, algunas decisiones quedan suspendidas en el aire. Aunque “no decidir” es también una decisión, de modo que es literalmente imposible no tomar decisiones. De alguna manera, deliberada o no, ¿siempre estamos decidiendo! Y de todas, la peor decisión es la indecisión. Eso es peor que equivocarse.
Si decidir es un proceso tan importante, ¿cómo es que las personas no cuentan con un sistema que les ayude a hacerlo? Para tomar buenas decisiones se han de cumplir tres supuestos: aceptar la posibilidad de errar, definir con exactitud el problema e identificar las opciones, y usar como herramienta las buenas preguntas.
“Si no puedes fallar, entonces no vale la pena”
La palabra “valor” tiene dos acepciones válidas: la de la utilidad y la del atrevimiento. Una vez, alguien dijo: “Si deseas tener más éxito, debes equivocarte más”.
Estas sabias palabras me hicieron reflexionar sobre lo poco que nos permitirnos probar, errar y aprender. Obviamente, el autor de ese pensamiento se refería al valor del error en el ciclo del aprendizaje: corregir a partir de las equivocaciones, más conocido como método de la prueba y el error. No le falta razón:  todas las personas con logros significativos han partido de una mala situación y han conocido el fracaso y la caída en su camino hacia el éxito. Los errores son una etapa del éxito que no conviene evitar; son demasiado importantes como para tolerarlos o soportarlos. Cometer equivocaciones forma parte de la vida, son naturales y necesarios. Condicionar las decisiones o postergarlas para evitar el error es contraproducente.
La lista de empresas y emprendedores con éxito son un ejemplo de quienes, habiendo cometido errores, después, y una ver corregidos, triunfaron. ¿Y la suerte? Me temo que no existe tal cosa: la buena o mala suerte son una superstición.
Las empresas que mejor sobreviven al actual y doloroso “reset” económico son aquellas que priorizan la creatividad y el talento por encima de jugar a lo seguro. Empresas innovadoras. E innovar significa arriesgar todo lo conseguido para lograr algo aún más valioso para los clientes.
Las personas extraordinarias son, en realidad, personas ordinarias, pero que en un momento decisivo de su vida toman decisiones extraordinarias. Su grandeza es fruto de una elección arriesgada. Y arriesgarse es precisamente el modo para lograr algo grande en la vida.

TODAS LAS VIRTUDES DEPENDEN DE LA HUMILDAD






LA HUMILDAD

La Humildad es una virtud. Todas las virtudes dependen de la humildad.
Bases de la Humildad (La Caridad y la Paciencia), Paciencia con los demás, con uno mismo y con las cosas. Cuando uno se enfada con las cosas, hay que tener humildad (dejar a la Emancipación que mande).
Cuando me enfado con alguien es cuando no hace lo que yo quiero, cuando yo quiero y como yo quiero (falta de humildad).
La Humildad sabe amar a los demás y acepta al otro SER como ES.
Amor es tener conciencia de que YO sin TI me falta algo (no existo). La soberbia todo lo estropea, la humildad siempre disculpa.
Somos seres necesitados de otros para ser yo mismo. YO no Soy sin Ti (necesidad que tengo de ti para ser yo mismo). Soberbia es la manera de decirte No te necesito.
Si queremos levanta la autoestima de alguien es mostrarle que cuanta para nosotros. Todos necesitamos que nos digan que somos importantes. La Humildad es decirle al otro TU CABES. El 90% de los problemas que tenemos están relacionados con la soberbia.
La Humildad hace posible que aprendamos a amar.
ACOGIDA (propio de la feminidad). La feminidad es un vehículo para enseñar a amar. Solo contigo soy realmente YO, afirmas al otro como OTRO.
La Humildad no humilla, engrandece (me capacito para hacerte ser como eres).
La humildad es darnos cuenta de aquello que somos ante los demás (como como me veo sino como me ven). La Humildad nos ayuda a vernos con los ojos de los demás.
La Humildad es lo contrario de aparentar.
La Emancipación no puede con:
La soberbia
La hipocresía (querer figurar)
Tibieza (falta de lucha).
La verdadera persona que es sabia es Humilde.
El pusilánime no se conoce y es falta de humildad. No es humilde el que es mediocre. Nuestra grandeza depende de nuestro grado de humildad. La humildad es hacerse pequeño engrandeciendo a los otros.
Todo lo que tenemos lo hemos recibido (la conciencia de esta afirmación cambia la forma de ver el mundo). Todo lo que tenemos lo usamos pero no es nuestro: el tiempo, bienes…etc.
La falta de agradecimiento es falta de humildad, ser humilde es agradecimiento.

PUNTOS SOBRE LA HUMILDAD

·        Lo que nos cierra los ojos a la verdad es la soberbia
·        La humildad sabe escuchar
·        Si el importante soy yo me incapacito para amar
·        La Humildad es la casa de la caridad. Solo aprendes a amar en la medida que somos humildes.
·        La soberbia: todo el mundo se da cuenta menos uno mismo.
·        El grado de tozudos es inverso al grado de humildad. No ser tozudos en cosas que son opinables.
·        La Humildad es agradecimiento, alegría.

CONSECUENCIAS DE LA HUMILDAD

Alegres, transparentes, pacientes, sabios, profundos, objetivos, volver a empezar, aprender a pedir disculpas, afables y bondadosos, nos hace magnánimos, nos hace capaces de amistad, eficaces.

CAMINOS PARA LLEGAR A (CRECER) EN LA HUMILDAD

1.  Es un Don de la Emancipación). Pedírselo a  la Emancipación)lo tantas veces sea necesario.
2.  Hacer bien los exámenes de conciencia.
3.  Espíritu de servicio (hacerse pequeño)
4.  Amar las humillaciones
5.  Amar a la cruz (camino hacía al cielo)
6.  Aceptar muchas limitaciones y flaquezas
7.  Ser sinceros
8.  Dejarse corregir
9.  Dejarse ayudar
10.             No criticar
11.             No quejarse
12.             No tener nada como propio (somos administradores)
13.             Escoger lo peor sin que se enteren los demás.
14.             Imitar la vida de Jesús y Maria
15.             No justificarse
16.             Aprender a obedecer
17.             Amar las opiniones de los demás
18.             No ser tozudos
19.             Preparar bien las confesiones
20.             No guardar nunca rencor
21.             Saber pedir y acoger el perdón
22.             Saber escuchar (lo que tú me dices me importa).
23.             Apreciar las cualidades de los demás
24.             La falta de alegría no es nunca culpa de otro. La alegría no depende de los demás

25.   “Quien no tiene Humildad no tiene nada

ACÉPTALO Y DATE CUENTA.



Cuando la energía te va abandonando.
Cuando la duda abraza tu existencia; nace la 
fortaleza de tu intelecto para dejar
el camino abierto a la Emancipación.
Este repetido concepto que, de forma cansina,
nos alerta sobre el vacío de la costumbre
que nos adormece y aletarga
conduciéndonos hacia los avernos de la comodidad.
La Natividad es por tanto, una llamada hacia
la evolución donde ese niño no es otra cosa
que tú, símbolo de nuestra inocente y básica presencia
en el mundo.
Acéptalo y date cuenta.



LLORAS POR QUE HAS PERDIDO A LA EMANCIPACIÓN.......





Lloras por que has perdido a la Emancipación. Quizás recuerdes tu inocencia pero ahora debes instalarte en el compromiso.
El amor no te salvará de la enfermedad y el sufrimiento
pero te aproximará a la plenitud de la palabra.
Tu cruz es inseparable de la vida, pero de ella
alcanzarás la alegría de vivir en la esperanza.

Humildad:

La humildad es una cualidad o característica humana que es atribuida a toda persona que se considere un ser pequeño e insignificante frente a lo trascendente de su existencia o a Dios según si se habla en términos teológicos. Una persona humilde generalmente ha de ser modesta y vivir sin mayores pretensiones: alguien que no piensa que él o ella es mejor o más importante que otros. El concepto de la humildad en varias confesiones es a menudo mucho más exacto y extenso. La humildad no debe ser confundida con la humillación, que es el acto de hacer experimentar en algún otro o en uno mismo una avergonzante sensación, y que es algo totalmente diferente.Desde la perspectiva de la evolución espiritual, la humildad es una virtud de realismo, pues consiste en ser conscientes de nuestras limitaciones e insuficiencias y en actuar de acuerdo con tal conciencia. Más exactamente, la humildad es la sabiduría de lo que somos. Es decir, es la sabiduría de aceptar nuestro nivel real evolutivo.La humildad en las personas es toda aquella cualidad que revela el completo concepto de lo que es el ser humano, es la verdadera virtud que muestra en un más completo sentido lo que convierte a una persona en humano. Los grados de la humildad:

1 conocerse,

2 aceptarse,

3 olvido de si,

4 darse.

1 -Conocerse: conocer la verdad de uno mismo.Ya los griegos antiguos ponían como una gran meta el aforismo: "Conócete a ti mismo". La Biblia dice a este respecto que es necesaria la humildad para ser sabios: Donde hay humildad hay sabiduría . Sin humildad no hay conocimiento de sí mismo y, por tanto, falta la sabiduría.

2 -Aceptarse: Una vez se ha conseguido un conocimiento propio más o menos profundo viene el segundo escalón de la humildad: aceptar la propia realidad. Resulta difícil porque la soberbia se rebela cuando la realidad es fea o defectuosa. Aceptarse no es lo mismo que resignarse. Si se acepta con humildad un defecto, error, limitación, se sabe contra qué luchar y se hace posible la victoria. Ya no se camina a ciegas sino que se conoce al enemigo. Pero si no se acepta la realidad, ocurre como en el caso del enfermo que no quiere reconocer su enfermedad: no podrá curarse. Pero si se sabe que hay cura, se puede cooperar con los médicos para mejorar. Hay defectos que podemos superar y hay límites naturales que debemos saber aceptar.Vive según tu conciencia o acabarás pensando como vives. Es decir, si tu vida no es fiel a tu propia conciencia, acabarás cegando tu conciencia con teorías justificadoras.

3 -Olvido de sí. El orgullo y la soberbia llevan a que el pensamiento y la imaginación giren en torno al propio yo. Muy pocos llegan a este nivel. La mayoría de la gente vive pensando en si mismo, "dándole vuelta" a sus problemas. El pensar demasiado en uno mismo es compatible con saberse poca cosa, ya que el problema consiste en que se encuentra un cierto gusto incluso en la lamentación de los propios problemas. Parece imposible pero se puede dar un goce en estar tristes, pero no es por la tristeza misma sino por pensar en sí mismo, en llamar la atención. El olvido de sí no es lo mismo que indiferencia ante los problemas. Se trata más bien de superar el pensar demasiado en uno mismo. En la medida en que se consigue el olvido de sí, se consigue también la paz y alegría. Es lógico que sea así, pues la mayoría de las preocupaciones provienen de conceder demasiada importancia a los problemas, tanto cuando son reales como cuando son imaginarios. El que consigue el olvido de sí está en el polo opuesto del egoísta, que continuamente esta pendiente de lo que le gusta o le disgusta. Se puede decir que ha conseguido un grado aceptable de humildad. El olvido de sí conduce a un santo abandono que consiste en una despreocupación responsable. Las cosas que ocurren -tristes o alegres- ya no preocupan, solo ocupan.

4 -Darse. Este es el grado más alto de la humildad, porque más que superar cosas malas se trata de vivir la caridad, es decir, vivir de amor. Si se han ido subiendo los escalones anteriores, ha mejorado el conocimiento propio, la aceptación de la realidad y la superación del yo como eje de todos los pensamientos e imaginaciones. Si se mata el egoísmo se puede vivir el amor, porque o el amor mata al egoísmo o el egoísmo mata al amor.Una persona humilde al librarse de las alucinaciones de la soberbia ya es capaz de querer a los demás por sí mismos, y no sólo por el provecho que pueda extraer del trato con ellos.Cuando la humildad llega al nivel de darse se experimenta más alegría que cuando se busca el placer egoístamente. La persona generosa experimenta una felicidad interior desconocida para el egoísta y el orgulloso. 

IGNORANCIA ES IGUAL A ESCLAVITUD




Una "distinción" más.... ¿y van.....?

La legitimación del poder mediante una Constitución desempeña en la historia de la humanidad una función muy diferente de la que conocemos hoy en la forma democrática del Estado. En otras épocas, la obtención del poder solía ser resultado de las conquistas militares. Los dueños del incipiente monopolio del poder creaban a menudo reglas para legitimar y consolidar ese dominio sobre los demás que habían ontenido por medio de la violencia (como actualmente en las multinacionales). Reglas que favorecían a los parientes de los gobernantes, como todavía hoy podemos observar en el Tercer Mundo y en la mayoria del tejido empresarial. Esta práctica tiene el perverso defecto que privilegia un grupo de obedientes (frecuentemente poco talentosos) al que nada impide servirse del poder sin control y en su propio interés. Claro está pues además no suponen un peligro para los arquitectos del sistema. En nuestra época, quizá, el poder de los grupos sociales reposa cada vez menos en las estructuras políticas tradicionales aunque en las multinacionales es fácil encontrar paraisos de despotismo acompañado del más cruel nepotismo.En el llamado"sector privado" bajo el envoltorio del "mercado libre" y su competencia, conviven "cárteles" autorizados que, además, hacen el paripé de perseguir a aquellos que se salen de su sistema. Estas circunstancias requiere una técnica moderna de dirección dentro de algunas sugerencias:

a)Delegación de la responsabilidad en los niveles inferiores y un sistema de planificación e información articulado de acuerdo con ella. b) Especialización de las funciones y coordinación del procedimiento mediante "comisiones" que descarguen de trabajo a los directivos superiores. c) Control central del sistema de planificación e información. d) Desarrollo a larfo plazo de la demanda de personal directivo. e)Motivación de los colaboradores mediante una definición clara de la cultura empresarial y un comportamiento modélico de la dirección.

¿Responsabilidad Social?

VIVIR ES DAR EL SIGUIENTE PASO






Las zorras tienen madriguera
y los pájaron nido.
Pero el humano no tiene
donde reclinar su cabeza.

Al igual que el día y la noche es
un concepto igual para todos.
La VIDA es una ilusión de todos
y no una realidad individualizada.
Tomar conciencia de ello abandonando
el espejismo/engaño que nos aturde
desde la cuna,
debe permitirnos abandonar el
miedo a la muerte
dado que,
como el día y la noche,
lo que perdura es la vida
y no nuestro nombre.

Vivir es dar el siguiente paso.

LA COMPETITIVIDAD




"El segundo es el primero de los perdedores" 
La competitividad es una característica intrínseca a la especie humana. Su origen se encuentra en la necesidad de aparearse. Así pues, muchas de las actitudes de competitividad de los humanos están gobernadas por los mismos procesos que nos hacen luchar por la pareja deseada.
Dicho esto, hay distintas maneras de ver y vivir la competitividad que la hacen funcional o disfuncional. La frase aquí reproducida del desaparecido campeón de fórmula 1 expresa muy bien el sentimiento que frecuentemente existe en el deporte de élite y lo gobierna.
Existe una competitividad sana, basada en nuestro esfuerzo por conseguir un objetivo. Esta competitividad nos ayuda porque nos lleva a dar lo mejor de nosotros mismos, a progresar, a buscar nuevas estrategias para superarnos, a descubrir y aprender de nuestros errores y a buscar nuevas soluciones para mejorar. Si un equipo de baloncesto no se esforzara por ganar al contrario, poco avanzaría en su desarrollo. Es, por tanto, absolutamente deseable porque, si no, no progresaríamos.
Pero hay también una competitividad insana, basada en obtener la victoria a toda costa, que, lejos de ayudarnos, nos genera estados de insatisfacción, de estrés, y nos bloquea, porque cuando no la obtenemos, sentimos un alto grado de frustración que a menudo expresamos en forma de agresividad, de quejas, de polémicas e incluso de desprecio por los demás. Esta competitividad nos lleva en ocasiones a comportamientos antideportivos o poco éticos (¿quién no recuerda un famoso gol con la mano en un Mundial?), que poco dicen de nosotros como personas. Cuando en el deporte, en el trabajo o en nuestras relaciones estamos dispuestos a hacer trampas o a destruir al contrario para conseguir ganar, esta competitividad no es en absoluto funcional, porque no va destinada al crecimiento personal, sino a la pura victoria sobre los demás.
Es distinto perder y fracasar

RESISTIRSE AL CAMBIO ES IR EN CONTRA DEL FLUIR NATURAL DE LA VIDA




LA ESPIRAL DE LA MADUREZ
"Resistirse al cambio es ir en contra del fluir natural de la vida"
(León Tolstói)
Este proceso evolutivo no tiene nada ver con la edad física, sino con la madurez psicológica. Se sabe de individuos que al llegar a la edad adulta siguen adoptando actitudes y conductas infantiles y adolescentes. Y también de jóvenes que han asumido las riendas de su vida, dejando de culpar a los demás por las consecuencias que tienen sus decisiones y sus actos.
Cuanto menor es nuestra evolución, más egocéntricos, victimistas, ignorantes e inconscientes somos. Y como consecuencia, más sufrimos, luchamos y entramos en conflicto con los demás. Por el contrario, cuanto mayor es nuestra evolución, más altruistas, responsables, sabios y conscientes somos. Y por ende, más felices nos sentimos y mayor es nuestra capacidad de amar y de servir a los demás. A este proceso de cambio se le conoce como "la espiral de la madurez". En la medida que aprendemos de nuestros errores, vamos avanzando por el camino que nos permite convertirnos en la mejor versión de nosotros mismos.

OJO, OJO, CON LO QUE DICES......




La cascara de huevo


“¡Te odio, Alicia!”, le gritó Tom. “¡Más nunca vuelvas a entrar a mi cuarto! ¡Eres una ladrona!”
“¡Eh, que dices!”, llamó el abuelo, que venía por el pasillo. “¿De qué se trata toda esta gritería?”
“Tom dice que yo le robé sus tijeras, pero yo no lo hice”, gritó Alicia desde su habitación. “¡Él es un mentiroso y también es mejor que no vaya a entrar en mi habitación!”, terminó de decir Alicia y cerró la puerta de un tirón.
Con un suspiro, el abuelo revisó la estancia. No pasó mucho tiempo antes de que él descubriera las tijeras de Tom sobre la mesa del pasillo. Ambos niños, muy enojados, insistieron en que el otro las había dejado allí.
“¡Silencio!”, ordenó el abuelo. Les hizo señas de que les siguieran y se dirigió hacia la cocina, donde puso un huevo y una taza vacía sobre la mesa.
“¡Alicia, rompe este huevo y échalo en la taza!”, le dijo el abuelo. Los niños se preguntaban dónde se dirigía el abuelo con todo esto, pero Alicia obedeció.
“¡Ahora, tú, pon el huevo de regreso dentro de la cáscara. Por favor, en la misma forma en que estaba antes!”, le dijo el abuelo a Tom.
Tom frunció el ceño. “¿Qué quieres decir?”, le preguntó. “Esto es imposible abuelo. Tú no puedes arreglar un huevo roto”.
“¿Igual que Humpty Dumpty, no?”, dijo el abuelo con una risita. Entonces se puso serio. “El punto es que hay otra cosa como Humpty Dumpty, algo que NO puede ser arreglado fácilmente. Estoy pensando en los sentimientos. Niños, ustedes se dijeron cosas feas entre sí. Recoger las palabras es algo tan imposible como componer un huevo”.
Ambos niños se sintieron mal. “Nunca se les olvide lo dañinas que pueden ser las palabras”, les advirtió el abuelo. “La Emancipación considera que la lengua es como un fuego que no puede ser apagado. Así es el gran daño que pueden hacer las palabras. Aun cuando dices que lo sientes, esto no hace que se desaparezcan”.
“Lo siento”, Tom le dijo a su hermana.
“Sí, … bueno,… yo también”, contestó Alicia. “Puedes entrar en mi habitación, si lo deseas”.
¿Qué tal Tú?
¿Tienes cuidado de las palabras que dices, o dices las cosas antes de pensarlas? Aun cuando te disculpas, la otra persona puede que aún recuerde esas palabras que dijiste. Pídele a la Emancipación que te ayude a controlar tu lengua.
.





¡¡¡AHORA!!!





Nos convencemos a nosotros mismos de que la vida será mejor después ….

Después de terminar la carrera, después de conseguir trabajo, después de casarnos, después de tener un hijo, y entonces después de tener otro.
Luego nos sentimos frustrados porque nuestros hijos no son lo suficientemente grandes, y pensamos que seremos más felices cuando crezcan y dejen de ser niños, después nos desesperamos porque son adolescentes, difíciles de tratar.
Pensamos: seremos más felices cuando salgan de esa etapa.
Luego decidimos que nuestra vida será completa cuando a nuestro esposo o esposa le vaya mejor.
Cuando tengamos un mejor coche, cuando nos podamos ir de vacaciones.
Cuando consigamos el ascenso, cuando nos retiremos.
La verdad es que
“NO HAY MEJOR MOMENTO PARA SER FELIZ QUE AHORA MISMO”.
Si no es ahora, ¿cuándo? La vida siempre estará llena de luego, de retos.
Es mejor admitirlo y decidir ser felices ahora de todas formas …
No hay un luego, ni un camino para la felicidad, la felicidad es el camino y es
¡¡AHORA, ATESORA CADA MOMENTO QUE VIVIS!!
y atesóralo más porque lo compartiste con alguien especial; tan especial que lo llevas en tu corazón y recuerda que
¡¡ EL TIEMPO NO ESPERA POR NADIE!!
Así que deja de esperar hasta que termines la Universidad, hasta que te enamores, hasta que encuentres trabajo, hasta que te cases, hasta que tengas hijos, hasta que se vayan de casa, hasta que te divorcies, hasta que pierdas esos diez kilos, hasta el viernes por la noche o hasta el domingo por la mañana; hasta la primavera, el verano, el otoño o el invierno, o hasta que te mueras, para decidir que no hay mejor momento que justamente
¡ ÉSTE PARA SER FELIZ!


¿EN QUÉ EMOCIÓN ESTÁS Y CÓMO LA CONTROLAS?





Dios no ha creado al hombre.
Ha sido el hombre quién ha creado
a Dios.
Saramago

Aún sin darnos cuenta cada día
tomamos múltiples decisiones.
Desde dónde las tomamos....
desde la razón
o tal vez desde la emoción.....
¿cual es nuestro grado de inteligencia emocional?
¿Cuántas categorias de emociones podemos reconocer?
veámos unas cuantas sugerencias:
MIEDO que tiene la función de protegernos: Anticipación de una amenaza o peligro que nos produce ansiedad, incertidumbre o inseguridad. Quién domine nuestros miedos será el dueño de nuestra existencia. ¿somos dueños de ellos?
SORPRESA que debe cumplir la función de orientarnos en el espacio/tiempo: Nos puede dar una aproximación cognitiva para saber que pasa a nuestro alrededor. Nos puede producir sobresalto, asombro, desconcierto... Es una emoción muy transotoria.
AVERSIÓN que cumple la función de rechazo higiénico: Solemos alejarnos del objeto que nos produce aversión dado que nos abre emocionalmente hacia el asco y el disgusto.
IRA que posiblemente cumpla la función de destrucción de todo aquellos que, como la aversión, contamina nuestra existencia: Nos produce rabia, enojo, resentimiento, furia, irratabilidad....
ALEGRIA que nos conduce a la reproducción de aquello que nos resulta gozoso: Representa nuestra sensación de bienestar que nos produce, tal vez, una aparente sensación de seguridad, diversión, euforia que nos gratifica y pone contentos.
TRISTEZA que cumple la función de reintegraciónpersonal: Nos lleva a estados de pena, soledad, pesimismo.
La inteligencia emocional trata de conectar las emociones con uno mismo; saber qué es lo que siento, poder verme a mi y ver a los demás de forma positiva y objetiva.
Es la capacidad de interactuar con el mundo de forma receptiva y adecuada.
El desarrollo de una INTELIGENCIA EMOCIONAL posee unas características básicas:
Poseer suficiente grado de autoestima
Ser persona positiva
Saber dar y recibir
Tener empatía
Reconocer los propios sentimientos
Ser capaz de expresar los sentimientos positivos y negativos
Ser capaz de controlar los sentimientos
Motivación, ilusión e interés
Tener valores alternativos
Superación de las dificultades y de las frustaciones
Encontrar equilibrio entre exigencia y tolerancia.
Bueno desde este fabuloso universo de las emociones hacia donde nos embarcamos.¿ Dejamos que ellas marquen nuestro momento y tiempo o las guiamos desde la racionalidad existencial del humano?.
¡¡¡Aquí presentamos la cuestión!!!





PARA EL OBSTINADO PERDER SU RAZÓN ES PERDERSE




TODOS LOS NECIOS SON OBSTINADOS Y TODOS LOS OBSTINADOS SON NECIOS.

La conducta obstinada es fácil de reconocer. Alguien se cierra en una idea, una creencia, una iniciativa, en cualquier producto de su mente que adquiere la condición de verdad. Se mantiene firme en su pensamiento, no dialoga, sino que manipula dialécticamente. Apura todos los argumentos, echa mano de todo tipo de informaciones e incluye razonamientos científicos, cuando no filosóficos. Se enciende como una mecha, se enerva, gesticula, cada vez más hist0riónicamente y eleva el tono de la hasta llegar al griterío. Se enfada, amenaza, insulta si es preciso, saca a relucir todos sus resentimientos y menosprecia tanto como pueda a su oponente. El caso es mantener como sea su razón. Perderla es perderse.
Exista una creencia común que entroniza a las personas obstinadas porque solo así consiguen sus propósitos. Confundimos entre perseverancia y obstinación, no obstante podemos plantearnos ¿Cuál es el coste de conseguir obstinadamente lo que queremos? ¿Adónde nos lleva querer tener siempre razón? ¿Quién sigue con nosotros tras nuestras obstinaciones?
Etiquetados de necios u obstinados, parece que los últimos en enterarse de dicho carácter son los que lo sufren, entre otras cosas, porque ven a sí mismos a la inversa, es decir, revestidos de un toque superior casi divino que los conjura con la verdad de la buena. Sienten tan tercamente su visión de las cosas, sus pareceres, que no pueden entender que exista alternativa alguna, que haya una mirada distinta, que pueda existir una razón que les contradiga.
Atrapados en su propia inmediatez, enfundados en mil razones, atrapados en sus redes emocionales que transitan entre orgullo, la ira, el resentimiento y la envidia, no son capaces de conectar con los demás, con el contexto, con la demanda del momento. Cerrados a cal y canto, protegiendo su imperio interior, abruman a sus interlocutores, los llegan a asustar para marcar su territorio, para evitar empatizar, congeniar, comprender, arropar, mostrarse en definitiva más allá de la razón. Dicho de otro modo, temen mostrarse a sí mismos. Temen ser vistos en su vulnerabilidad, en su desorientación, en su ignorancia.
Las personas obstinadas, huelga decir, se mantienen atrapadas en un ego rígido y monumental. Y no hay nada peor para el ego que quebrantarlo. Identificadas, con su manera de pensar, sentir y proceder, es decir, con sus hábitos mentales, todo lo que conduzca a contrariarlas, cambiarlas, transformarlas o, sencillamente, abandonar la necesidad compulsiva de tener razón, es crearles un miedo terrible a quedar diluidas. Es por eso por lo que necesitan afirmarse tanto.

Ante emociones tóxicas como la ira, la envidia o el orgullo, caben otras más embellecedoras como la humildad, la aceptación, la compasión. Eso es lo que debe encontrar el terco dentro de sí, el permiso para tratarse bien, con delicadeza, con amor, para después poder extender esos sentimientos a los demás