TERTULIAS/CHARLAS SOBRE COACHING EMANCIPADOR EN EL CÍRCULO DE COACHING ESPECIALIZADO.



Periódicamente nos reunimos en "petit comité", con un aforo máximo de 10 personas, para debatir sobre COACHING EMANCIPADOR.
Son diálogos participativos para realizar una "iniciación" en la disciplina del coaching adaptada a tu universo de sueños.
Si estás interesada/o en participar GRATUITAMENTE deja tu reserva en paco.bailac@salaidavinci.es y te informaremos de los calendarios previstos.

¡¡¡Ven te esperamos!!!



TEXTOS PARA EL ALMA 448


   Al igual que los niños........  Los humanos cuando alcanzan cierta edad están dominados por el "YO".
Si durante la etapa formativa, nuestra especie, no asume que hemos de actuar sobre el "vosotros" llega el momento donde la vejez egoísta manda sobre nosotros.
Ataviados con ese vestuario social, los personajes, son rechazados por casi todos  como si fueran apestados.
 Para paliar con esa característica social, además del cariño y la comprensión del otro, debemos prepararnos en etapas tempranas, ya que vivir sobre la "tolerancia ajena"  es también un acto de egoísmo.
Ser "veterano" es una exquisitez sutil que no debe agobiar al otro. Es una aroma final que puede "embrujar" a la compañía si se muestra como debe ser; libre y desinteresada.
Sin duda tiene unas limitaciones que deben superarse con talento y dignidad para así poder mostrar el néctar de la sabiduría que otorga el tiempo.
El entorno no debe ser la "asistencia social" que cubra las carencias. Estas deben estar atendidas discretamente por la sociedad en base a nuestra contribución en épocas productivas.

Pero para liberarse del "YO" hemos de desearlo, reconocerlo y practicarlo. Es triste observar a un adulto atrincherado en esa postura del "para mi" que tanto nos habla de su lejanía con la evolución, que tanto nos nuestra su distanciamiento con la Emancipación.

TEXTOS PARA EL ALMA 447




Tenlo en cuenta..... 
Cuando tu paciencia se pone a prueba, es la Emancipación que trata de mostrarte algo de tu carácter y, por ende, de tu personalidad.

TEXTOS PARA EL ALMA 446




  Haz lo que te gusta o acabará gustándote lo que haces. 

TEXTOS PARA EL ALMA 445


  El sentido reencontrado puede resultar una motivación ante el frío existir que nos presenta la sociedad.
Hasta no hace mucho vivíamos, la mayoría, unos para morir cruelmente en las guerras y otros para subsistir miserablemente no más de 4 décadas.
Ahora, con el avance de la ciencia, vivimos en la "cárcel del YO" dentro de una "granja de consumo" donde se trata de TENER y TENER sin sentido de existir más allá del consumo por el consumo de la última generación de cualquier producto.
Pero ¿podemos reencontrar un sentido social más allá de POSEER MATERIA?
La religión está altamente desprestigiada pues durante siglos ha sido "el opio del pueblo" que con sus promesas de felicidad eterna nos ha adormilado en la pasividad.
Y pienso que SI; nos podemos reencontrar con el "sentido inmaterial del humano" obviando en concepto "tener para mi" para transformarlo en "compartirlo con......"
Realmente si lo piensas no "tienes nada fuera de ti”. Todo es eventual y transitorio por eso nos falta "reencontrar el sentido" que en otras épocas vivía entre nosotros: POTENCIAR EL TALENTO fuera de "la granja del consumo".
Pocos de nosotros conocen la esencia de la música (no los 40 Principales); casi nadie lee poesía, quién estudia matemáticas debe comer aparte y el arte en general se contempla dentro de un circuito turístico que compramos a plazos en una gran superficie comercial.

La pena es que nuestro talento está ahí, esperando. No te olvides de él pues cuando desees recuperarlo quizá con suerte estarás ya en "la granja de cuidados paliativos" y entonces será tarde: y morirás llorando.

TEXTOS PARA EL ALMA 444



Algunas personas se quejan de que la Emancipación le puso espinas a las rosas, mientras otras la alaban por haber puesto rosas entre las espinas

DESDE LA INFANCIA, LA SOCIEDAD INCULCA LA IMPORTANCIA DE APRENDER A PERDONAR


La carcoma del resentimiento

Perdonar no es fácil, pero fantasear con la venganza solo prolonga el rencor. Hay que pasar página, no hacerse tantas preguntas y pensar en el futuro


Hace tiempo impartí una conferencia en una prisión de hombres. En el discurso hablé de emociones tan corrientes como la vergüenza, la pena, la rabia, el miedo o el resentimiento. En el turno del debate, uno de los internos contó cómo al ingresar en el centro penitenciario se sentía muy dolido por algo que su novia y su mejor amigo le habían hecho. No dio más detalles. Simplemente explicó que cada día, al despertarse, se encontraba encerrado no solo tras las barreras físicas de la cárcel, sino en una auténtica jaula de rencor. El detalle más punzante es que confesó que estuvo varios años así. Un día se dio cuenta de que el resentimiento era absurdamente inútil. ¿Qué iba a conseguir fantaseando continuamente con vengarse? Semanas después, la bibliotecaria que me invitó a impartir aquella conferencia me contó que, a raíz de esa confesión, otros internos resentidos se acercaron a él porque también querían deshacerse de esa carcoma que sentían en el pecho. Después de escuchar el testimonio de su compañero, comprendieron que era posible dejar a un lado el rencor.
Desde la infancia, la sociedad inculca la importancia de aprender a perdonar. De hecho, la atmósfera judeocristiana está impregnada de ese mensaje. Pero desde la psicología se le ha dado otro significado al perdón. Lo que se desprende de los estudios realizados en este campo es que no se debe perdonar con fines altruistas, sino por puro egoísmo. Es decir, hay que olvidar para alimentar nuestra propia felicidad. Para entender el sentido de este verbo, lo mejor es aclarar lo que no significa.
No quiere decir que haya que olvidar. No existe ninguna cirugía que extraiga del cerebro recuerdos tan dolorosos como los que han sufrido las víctimas de malos tratos, o aquellos que fueron el blanco de una estafa o de cualquier otro tipo de abuso o humillación. Es muy complicado vivir con ese dolor sobre la espalda, pero al final se puede superar. El milagro del perdón es que su capacidad corrosiva se va diluyendo. No solo mengua su mordiente, sino su aparición en la conciencia. Los recuerdos permanecen allí, pero, si se logra dejarlos atrás, es posible que no afloren tan a menudo. Al final aparecerán solo cuando se les invoque, pero nunca lo harán por sí mismos. Es comprensible que cuando el rencor está en plena ebullición, el resentido no se crea esta teoría, pero hay que confiar.


“La gente no está dispuesta a renunciar a sus celos y preocupaciones, a sus resentimientos y culpabilidades, porque estas emociones negativas, con sus punzadas, les dan la sensación de estar vivos”, dijo el Maestro. Y puso este ejemplo: “Un cartero se metió con su bicicleta por un prado, a fin de atajar. A mitad de camino, un toro se fijó en él y se puso a perseguirlo. Finalmente, y después de pasar muchos apuros, el hombre consiguió ponerse a salvo. ‘Casi te agarra, ¿eh?’, le dijo alguien que había observado lo ocurrido. ‘Sí’, respondió el cartero, ‘como todos los días”.
No significa tener que entender al otro. Es más fácil superar el resentimiento si se conocen los motivos que han llevado a la otra persona a hacer daño, pero no siempre existe una explicación lógica. Y sin embargo es muy tentativo caer en el error de buscar argumentos racionales que fundamenten el daño sufrido. Pero si se sigue este camino, se acabará dando vueltas y más vueltas a todos los detalles, pero no se concretará nada. Es decir, se adentrará en un laberinto de difícil salida.

Fred Luskin, director del departamento de estudios relacionados con el perdón de la Universidad de Stanford, en Estados Unidos, aconseja que es bueno olvidarse de las expectativas sobre cómo deben actuar los demás para que ese laberinto del rencor se desplome por sí solo. Este lío llega a enzarzarse aún más cuando alguien se hace preguntas del estilo “¿Por qué a mí?”. Lo conveniente es intentar no dar respuesta a esta cuestión porque lo único que genera es más frustración.
No hay que reconciliarse forzosamente con el pecador. El perdón tiene más finales de los que nos enseñaron. No se trata obligatoriamente de poner la otra mejilla, quizá usted no esté dispuesto a arriesgarse más. Lo que cuenta es sentirse bien con uno mismo y quizá sea imposible volver a confiar en esa persona. Por este motivo, se puede llegar a perdonar a alguien y luego decidir si se quiere o no apartar a ese pecador de nuestra vida.
Entonces, ¿qué significa perdonar? Se trata simplemente de pasar página y olvidarse de la venganza. Un estudio dirigido por Christine Bogar y Diana Hulse-Killacky, de las universidades estadounidenses de Alabama del Sur y de Nueva Orleans, que fue publicado en 2011 por la revista Journal of Counseling & Development, muestra cómo el perdón fue la clave para que una decena de mujeres superaran los abusos sexuales que habían sufrido durante su infancia. Todas relataron que perdonar al agresor supuso un gran logro para dejar atrás ese capítulo de su vida. Saber olvidar es, por tanto, poner la felicidad en nuestras manos y no en manos del otro. Según algunas investigaciones, perdonar garantiza más años de vida, menos depresión y riesgo de infarto, una presión arterial más baja e ­incluso un sistema inmunitario fortalecido. En definitiva, la exoneración trae consigo bienestar y salud.


Por lo costoso que muchas veces puede resultar, solo se puede perdonar si se crece interiormente. Everett Worthington es, además de ingeniero nuclear, catedrático de Psicología de la Universidad de Virginia (Estados Unidos) y está especializado en el tema del perdón. Worthington confesó en una entrevista que alguna vez él también se había sentido incapaz de olvidar. Un ladrón entró en casa de su madre y la golpeó brutalmente hasta matarla. Su primer pensamiento fue acabar con el agresor con su bate de béisbol. Por aquella época, Worthington acababa de publicar uno de sus libros sobre la capacidad de perdonar. Parecía que la vida le estaba gastando una broma de mal gusto para probar si en realidad sabría aplicarse el cuento. Al final superó la prueba. Se puso en el lugar del ladrón y pensó en el pánico que habría sentido al entrar a una casa que creía vacía y encontrarse a una señora. Entonces se dio cuenta de que él mismo no era mejor que el ladrón porque en realidad el asaltante reaccionó al pánico y, en cambio, él se había planteado que quería asesinarlo.

¿El tiempo ayuda? No es fácil controlar las emociones y sentirse humillado es bastante normal. Pero una vez superado este primer sentimiento debe hacer acto de presencia la voluntad. A partir de aquí el tiempo puede jugar a favor o en contra. Si el resentimiento se enquista, se volverá crónico; si se deja pasar, será más fácil seguir adelante. Aunque pueda parecer de una obviedad aplastante, es necesario querer pasar página. A veces, alguna parte de nosotros está gozando con ese sufrimiento. Nos hace sentir vivos, lo preferimos a la planicie que, se intuye, vendrá después. Hay que proponerse dejar atrás lo que nos daña, como hace el personaje de Scarlett O’Hara en la película Lo que el viento se llevó cuando dice: “A Dios pongo por testigo que jamás volveré a pasar hambre”.
Para liberar el resentimiento, los expertos también sugieren pensar en el futuro. Sin embargo, cuando se está dentro de la oscura habitación de la amargura y se mira al exterior, la luz puede cegar tanto que es imposible ver nada. En ese estado es fácil cuestionarse qué sentido tiene pensar en nuevos propósitos. Pero la vida sigue y hay que volver a acostumbrarse a la claridad del día. Poco a poco irán apareciendo nuevas siluetas que nos devuelvan la ilusión y den portazo a los sentimientos más dolorosos. La puerta de esa habitación se abrirá solo después de un acto sincero de introspección. Entonces saldremos sintiéndonos diferentes, habremos madurado y lo que encontraremos fuera será mucho mejor de lo que recordamos.

TEXTOS PARA EL ALMA 443



El éxito no se mide según los logros alcanzados, sino por los obstáculos que fueron superados para lograrlo.

TEXTOS PARA EL ALMA 442




El RESPETO en las relaciones interpersonales comienza en el individuo, en el reconocimiento del mismo, como entidad única, que necesita comprender al otro. Consiste en saber valorar las características del OTRO obviando TUS intereses. Por ello es más fácil querer a todo el mundo que respetar a una persona. 
Así no busquemos lo fácil y cómodo, abracemos lo profundo y efectivo, es más ilustrado y generoso.

Por un respeto recíproco.

TEXTOS PARA EL ALMA 441


La gran aportación trinitaria que pasa inadvertida o despreciada y que en el laicismo la podríamos comparar con la democracia y su ética.
La esencia del antiguo concepto pagano del dios se convierte en el inicio del ciclo divino equiparándolo al padre familiar. Como es natural este nuevo ciclo infinito de deidades incluye al hijo y de la suma infinita de hijos surge el espíritu santo que es la presencia anónima de todos nosotros.
Ya no somos súbditos de una deidad sino parte de ella.

TEXTOS PARA EL ALMA 440



ACTUAR bajo las peticiones del cuerpo es acercarte al fracaso más profundo.
La complejidad social que rodea nuestra existencia requiere de unas actuaciones más orientadas hacia los RESULTADOS que hacia las EMOCIONES.
Claro está que esas emociones deben atenderse pero sin darles tanto protagonismo como para apartarnos del escenario profesional, cuna de nuestro sustento.
Muchos nos dejamos llevar por el dictado del cuerpo ante el clima y según haga frio o calor actuamos y accionamos. No, no eso no es profesional y es propio de personas poco evolucionadas en los capítulos del esfuerzo y el entreno.
Somos lo que hacemos y sin los automatismos propios de la evolución, cuando llega el depredador no sabemos reaccionar.
Mantén tu estado de vigilia abierto a la curiosidad pues la evolución requerirá de ti y sino haya respuesta; te olvidará.



TEXTOS PARA EL ALMA 439

  


LA TRINIDAD - Es un concepto altamente desconocido por gran parte de los usuarios del transporte público y me temo que también por otros muchos ciudadanos.
Dicen es un concepto espiritual que, como es frecuente, influye en el comportamiento de las masas cristianas, o no. La ética cristiana, desde su origen contempla tres estadios de deidad los cuales giran desde la terrenalidad para subirla a los altares del VOSOTROS desde y a través del abandono del egoísmo del YO.

Los principios trinitarios, por tu propia naturaleza, son plurales dado que no contemplan una jerarquía divina sino una comunidad participativa: PADRE, HIJO y ESPÍRITU SANTO.

TEXTO PARA EL ALMA 438


De Sant Joan..... - A la Merçe el pueblo llano celebra la cosecha. Sin duda el verano con sus días de luz y aromas de flora alegre es la época del año donde la alegría se manifiesta por todos los rincones.
Llega una eclosión de vida que ensordece a la razón e invita al humano a la práctica de su labor reproductora. Con cierto desenfreno cada villa, pueblo o pedanía celebra las fiestas de su santo Patrón en coordinada comunión entre carne y espíritu.
Es el momento de "recoger" lo sembrado y saber proteger las semillas para la próxima siembra. Se inicia un nuevo proceso vital para el sustento y la riqueza terrenal. Más ¿qué pasa con el espíritu de nuestra alma? ¿Tiene también ciclos? ¿Debemos cuidarla y alimentarla?
El pueblo llano, que para eso se llama así, no busca nada más allá de las satisfacciones básicas precisas para su supervivencia. Ahí,  poco espacio queda para alimentar el espíritu y mucho menos para buscar "órdenes metafísicas" que den  "algún sentido" a nuestra capacidad de amar.
Hay quien afirma que se llega al "valle de la felicidad" a través del OTRO y no buscándola para sí mismo. Si generamos la alegría a un niño, ésta nos la devuelve mediante una sonrisa "angelical" que regenera nuestro Ser.
Así pues, hacer sin esperar recompensa alguna, puede resultar una adecuada "siembra" para la dormida alma; Vivir amando a la otredad y que su feedbak sea el fruto que alimente la esencia del Ser.
Sin duda tú eres el SANTO PATRÓN de la voluntad de amar.

¡¡¡Feliz verano!!!
aaah. hay quién tiene el ciclo cambiado y se regenera con la llegada del nuevo año.

TEXTOS PARA EL ALMA 437

  


 Esto es así.. 
No son las cargas del hoy lo que enloquece al hombre....
Son los arrepentimientos por el ayer y el miedo al mañana.

"DISFRUTA EL MOMENTO"

SI A MI VOLVIERAS.....

Aprender y no actuar vale para poco

El movimiento implica la posibilidad de equivocarse, pero es la única manera de enriquecer el intelecto y fomentar la creatividad


Para pasar de las ideas a los hechos es necesario actuar, y toda acción viene precedida de una decisión y un compromiso firmes. Si esto falla, las buenas intenciones se quedan en el simple plano de la teoría. Los hechos revelan mucho más de alguien porque tienen más significado que las palabras. Al final, tener cierto conocimiento de algo sirve de bien poco si no se lleva a la práctica.
La inercia es la propiedad que tienen los entes de permanecer en su estado de reposo, o movimiento, mientras la fuerza aplicada sea igual a cero. Como consecuencia, un cuerpo conserva su estado si no hay una fuerza actuando sobre él. Hasta aquí es fácil entender que las personas que están inactivas tenderán a seguir sin moverse y que las activas seguirán su ritmo. Pero ¿qué es lo que nos detiene?
Cuando un cohete es lanzado al espacio consume la mayor parte de combustible para vencer la fuerza de gravedad. Salir de la atmósfera le exige mucha energía y tal vez pudiera parecer que todo su periplo será así: esfuerzo y más esfuerzo, motores a máximo rendimiento. Pero es justo lo contrario: una vez fuera, la inercia juega a favor de la nave espacial y requiere mucha menos energía para avanzar, siempre a una altísima velocidad. Así ocurre con casi todo lo que emprendemos. Lo que cuesta es empezar, pasar a la acción.
Hay dos fuerzas que en muchas ocasiones impiden actuar: la inercia interna y la externa. Y de las dos, la más fuerte es la interna. Es la batalla que tiene lugar en la mente y que exige desarmar las excusas que bloquean la acción. El rival interno, es decir, uno mismo, es el más difícil de vencer; pero una vez derrotado, superar los obstáculos que vienen de fuera es relativamente más sencillo. Pasar del reposo (no hacer) al movimiento (hacer) exige elegir, y esto siempre implica renunciar a otras opciones. Por ejemplo, cuando nos enamoramos de alguien estamos desechando al resto de candidatos, o cuando decidimos un destino vacacional renunciamos a todos los demás. Una decisión es una eliminación de alternativas, y el inconsciente lo percibe como una pérdida, aunque solo sea de opciones y no real.

Actuar, además, implica la posibilidad de equivocarse. Aunque no hacerlo puede traer peores consecuencias, las personas perciben que la inacción los protege del error, y que el fracaso solo es posible cuando uno selecciona la carta incorrecta. No sospechan que no elegir es de hecho elegir no hacer nada, lo cual también es una decisión. Otra causa para mantenerse inmóvil es no disponer de referentes que hayan tomado esa misma actitud y hayan actuado en consecuencia. El éxito de los demás es siempre inspirador. Revela que si ellos pudieron actuar y conseguir resultados, el resto puede hacerlo también. Modelar el comportamiento de la gente exitosa es un buen recurso para decidirse a dar el paso.

El ser humano es un buscador de conocimiento insaciable, pero no aprende de lo que oye, lee, memoriza o estudia, sino de lo que pone en práctica. En la pirámide del aprendizaje, el conocimiento intelectual es ampliamente superado por las lecciones que se aprenden mientras se actúa (learning by doing, tal y como se conoce en inglés). Saber desde la teoría es tener información, pero saber desde el hacer es conocimiento. Tampoco se trata de hacer por hacer, sino de sacar conclusiones del resultado de los actos para modular el comportamiento. Saber y hacer no deberían ser polos opuestos, ya que de su maridaje (saber hacer) se obtiene la buena práctica de lo aprendido.
El sabio es quien conoce pocas cosas pero las domina, el sabihondo es el que sabe mucho pero sin profundidad. Vale la pena llegar hasta el fondo del conocimiento en lugar de flirtear con la información. Hoy día hay un exceso de datos comparado con la capacidad de hacer algo con ellos, y no se dispone ni de tiempo ni de las herramientas para hacer uso de toda la información a la que tenemos acceso. Nos ahogamos en un océano de conocimientos que no han sido validados por la experimentación. Esta sobredosis genera adicción y, absorbidos por la necesidad de conocer más, olvidamos llevar a la práctica todo lo que aprendemos. Un ejemplo de ello es la obsesión por leer una cantidad de libros sobre un tema sin apenas profundizar en ninguno. Olvidarlo casi todo y acabar hecho un lío, sin saber qué pensar.

“Sé que mucha gente dice ‘no’ o ‘déjame que lo piense’ de manera automática, un tipo de respuesta de Pavlov a una pregunta, tanto si no tiene importancia como si es importante. Quizá sean demasiado precavidos o sienten cierto recelo hacia las nuevas ideas, o sencillamente, necesitan tiempo para pensar. Pero esa no es mi manera de afrontar las cosas. Si algo me parece una buena idea, digo: ‘Sí, lo tendré en cuenta’, y luego pienso cómo llevarlo a cabo. Por supuesto que no digo que sí a todo. Pero qué es peor: ¿cometer un error ocasional o tener una mente cerrada y perder las oportunidades?”.

Hagámoslo, Richard Branson.
El exceso de información provoca un empacho de análisis y en ese momento es cuando llega la parálisis. La explicación a este fenómeno es sencilla: es más fácil aprender que hacer. Supone un menor riesgo, por lo que es más cómodo. Cambiar una creencia es sencillo, pero modificar el comportamiento ya es otra cosa. Cuántas veces, en una conversación, alguien dice: “Sí, eso ya lo leí”, o “sí, eso ya lo sé”, pero es un conocimiento de oídas, no experiencial. Lo que se conoce pero no llega a ponerse en práctica en realidad es como si no se supiera (simplemente se está de acuerdo).
La mente está en un proceso continuo de aprendizaje y olvido. La nueva información entra en nuestra cabeza para borrar la anterior. Y la única forma de fijar esos datos es o bien por experimentación o por repetición. Si se olvida lo que se lee –y eso va a ocurrir–, nada mejor que resumir lo aprendido. Se pueden redactar notas o, mejor aún, crear un mapa mental, una especie de cartografía que contenga las ideas más relevantes de lo leído y aprendido.
Si un concepto está en el pensamiento pero no se expresa, en realidad es como si no estuviera en ninguna parte y acaba perdiéndose. Cuando tenemos una buena idea, es imprescindible anotarla para que no se disuelva. Tomar apuntes o hacer listas, por ejemplo, funcionan bien como recordatorio, aunque no mejoran nuestra creatividad. Una buena forma de aprender es enseñar las propias ideas que queremos conservar. No es ninguna contradicción. Enseñar lo aprendido, compartirlo una y otra vez, hace que la teoría se integre y acabe por formar parte del docente, y así acaba reflejándose en su comportamiento.
Los mapas mentales consisten en un esquema que parte de una idea central de la que van radiando otros nuevos planteamientos, con el uso de colores, imágenes y palabras clave. El poder de este resumen tiene efectos en la creatividad, la memoria, la organización de las ideas, la percepción y la comprensión, entre otras cualidades. La cartografía intelectual es una técnica superior a la repetición, a las listas y a la enseñanza para conseguir un aprendizaje acelerado. Si ese croquis formula además un plan de acción, el éxito está garantizado. Las personas exitosas incluyen en su plan de acción lo que acaban de aprender, no se limitan a saberlo, prefieren hacerlo, y pasar así de la teoría a la acción. En resumen, todo se reduce a la transferencia de información en la experimentación. Una pregunta que todo el mundo debería plantearse de vez en cuando es: ¿cómo llevar a la práctica lo que acabo de aprender en la teoría?

TEXTOS PARA EL ALMA 436

Fotograma de la película 'La chica danesa'.

. Un clásico....
 A la Emancipación le pido simplemente tres cosas:
1.-  que me muestre aquellas cosas o circunstancias que  acerquen al desarrollo del SER.
2.- que me separe de todo aquello que  envilece con el TENER.
3.- Sinceramente le suplico para que me dote de inteligencia para distinguir 1 de 2.

Ya que.... "Dentro de cada persona hay un Ser humano que quiere vivir."

TEXTOS PARA EL ALMA 435

  

Fracasar  no significa que no hayamos logrado nada.....significa que hemos aprendido algo.
Fracasar no significa que nos hemos desgraciado; significa que estuvimos dispuestos a intentarlo.
Fracasar no significa que somos inferiores....significa que no somos perfectos.
Fracasar no significa que hemos desperdiciado nuestra vida......significa que tenemos una razón para comenzar de nuevo.
Aun cuando tu caída sea desastrosa con un corazón humilde levantarás de nuevo.

"de la mortaja de un "gusano de seda" surge un bello vestido de novia"


TEXTOS PARA EL ALMA 434


Enterrado en vertical es como en la actualidad los ayuntamientos aprovechan los espacios destinados a la fosa común.
Sin duda, el enterramiento, es una ancestral costumbre de  la civilización humana que nos distingue de los primates.
Llegar a los estadios eternos se hace como se ha vivido. Con fasto o modestia según el "modelo" copiado de los anteriores.
Ahorrar costes y espacio es ahora lo principal aunque aún se aprovechan funerarias y Consistorios del duelo emocional del cliente.

El enterramiento vertical es lo más sencillo y el nivel más humilde que el humano práctica para conservar la dignidad.
¿Desaparecer en vertical o en horizontal?

TEXTOS PARA EL ALMA 433

¿EMPODERAMIENTO DE LA CIUDADANIA?

 La representación no...... parlamentaria en Catalunya es un fenómeno curioso ya que actúa como soporte de los partidos soberanistas o quizá ha puesto a éstas formaciones políticas al dictado de  su voluntad.
Escuchar, hasta hace poco, a la representante de LA ASAMBLEA NACIONAL CATALANA, a la señora Carmen, era un acontecimiento para las masas soberanistas ilusionadas por ella. Ha sido, diría, el impulso popular que entusiasmo al pueblo.
Junto a ella pero con mayor moderación, Muriel, dama que representa a la organización  OMNIUM CULTURAL han construido ese estado de ánimo propio de una "noche de reyes"  que ha supuesto para la globalidad del "territorio" un estado de ánimo pre-bélico.
Y con este "sueño" bueno o malo han llegado las elecciones municipales 2015; y aquello que parecía un paseo para el soberanismo, no ha llegado. El estandarte del capitalismo teñido de catalanismo que guiaba la ciudad de Barcelona, ha perdido representatividad después de "destaparte" una trama de corrupción multimillonaria de su fundador y "pal de paller" señor JORDI PUJOL y familia.
Ahora "el territori", como el imperio romano, se está desmembrando en una "sopa de siglas" desordenadas que buscan el poder como sucedió en 1975.
Se han perdido 40 años de evolución gracias a CiU y esta formación, a la desesperada con Muriel y Carmen de "palmeras", intenta salvar sus intereses convocando elecciones en el "territori" para Septiembre 2015, justo después de que OMNIUM y la ANC nos entusiasmen con los fastos nacionalistas de la Diada.
En paralelo, la sociedad "real", pasa privaciones sanitarias, laborales y culturales sin que sus representantes se pronuncien al respecto.

El futuro son salarios y horarios nivel China y majestuosas representaciones de "pais" divino solo para las familias del poder, donde el "gran timonel" Jordi Pujol estará eternamente representado.
¡¡¡ ya tenemos president !!!

TEXTOS PARA EL ALMA 432




 No presenta la misma jerarquía social decir: "mira MI coche....." que decir "en este coche me desplazo a veces" solo por poner un ejemplo.
Nos han acostumbrado a considerar que sin POSEER (marido, hijos, amigos, casa, chalet, etcétera.....) no somos nada....simplemente unos pringaos. Así, desgraciadamente, somos poseídos por la posesión y en este "sin sentido" realizamos la "farsa" de existir en la sociedad del tener.
Hay colectividades, en cambio, que niegan toda posesión propia cuidando el bien común con compromiso y responsabilidad.
No utilizan en ningún caso en pronombre MI y si ensalzan las cosas o personas por sí mismas.
El árbol es lo que es y no dirían " mi árbol " igual que Modesto es un ciudadano y no "mi hijo".
La dificultad es que nos han acostumbrado a POSEER y sin ello no somos nada. Ser usufructuarios de la "felicidad" no sirve; solo nos vale poseerla y mostrarla como propia.
Fíjate como nos delata el lenguaje: "he aprobado el doctorado" o "me han suspendido las prácticas".

Ser o poseer.........

TEXTOS PARA EL ALMA 431


Son diversas las "cosas", pero especialmente las personas , que han participado en la manifestación y cristalización de lo que eres o no. Tu relación con el "otro" ha forjado el carácter con el que te presentas ahora ante los demás.
Unos te han amado, otros te habrán enseñado a desarrollarte como profesional, algunos te han regalado su conocimiento para que amplíes tus distinciones y también, muchos, te han escuchado para aprender de ti.
Sin duda, TODOS, han sido importantes; incluso quienes han sido ácidos contigo. Intenta recordarlos en su conjunto pues cada uno es una molécula de ti como sin duda Tú lo eres para mí.


TEXTOS PARA EL ALMA 430



Estamos educados a  hablar en posesivo cuando en realidad no poseemos nada. La intención al acuñar el lenguaje es vincularnos con el "POSEER" para así responsabilizarnos mediante el "apego". Anteponer el pronombre posesivo "MI"  al nombre supone identificarnos con él y poseerlo como propio aunque esto solo es una creencia más.
¡¡¡ NO LO DUDES NO TENEMOS NADA !!!

TEXTOS PARA EL ALMA 429

  
En tu existencia, no debes olvidarlo ya que ha contribuido a configurar tu carácter y personalidad,
son diversas las "cosas"que influyen pero especialmente las personas que han participado en la manifestación de lo que eres o no. Tu relación con el "otro" ha forjado el carácter con el que te presentas ante los demás.
Unos te han amado, otros te habrán enseñado a desarrollarte como profesionales, algunos te han regalado sus conocimientos para que amplíes tus distinciones y también, muchos, te han escuchado para aprender de ti.
Sin duda, TODOS, han sido importantes; incluso quienes han sido ácidos contigo. Intenta recordarlos en su conjunto pues cada uno es una molécula de ti como sin duda Tú lo eres para mí.
Nuestro espejo es el "otro"


TEXTOS PARA EL ALMA 428


   Conciencia Plena 
 Convivir sin el espejismo del engaño institucional es difícil y requiere de una cierta preparación; diría que es un proceso con distintas etapas donde una puede llevar a la otra o no.
Hasta hace  relativamente poco (y aun con gran vigencia) las doctrinas de la FE (unas más que otras) han divulgado que la salvación está en abrazar su discurso divino al objeto de ganar los "cielos" y sentarse junto al Padre (no sé si a su izquierda o derecha) para reposar en Paz.
Con este argumento, adaptado a las épocas, se han controlado los comportamientos de generaciones y generaciones que en busca de la salvación divina se han quedado "quietos" ante la pobreza e injusticia en el reparto de los excedentes y plusvalías.
Pero ante tanto fraude espiritual y alcanzado cierto bienestar material el agente de "adormilador social" es otro: Hacienda y las posibilidades para desgravar.
Si, ante la llamada "sociedad del bienestar" la usura, en forma de desgravación", ha tomado el papel "salvador" que nos acerca al Padre (y nos sienta a su lado -derecho o izquierdo-). Si en Estado quiere vender algo nos permite desgravar parte del coste de la declaración de Renta. Así dirige el consumo y "alegra" a la masa silenciosa solo preocupada por su gozo a costa del otro.
Manifestamos buscar el bien común y solo deseamos que Hacienda nos devuelva aquello que nos retuvo cautelarmente y que nos enloquece recuperar.
Buscar la CONCIENCIA PLENA debe representarnos abandonar la comodidad de la ignorancia y posicionarnos con humildad en la genética de las cosas. No debemos prolongar hasta el infinito la ilusión y esperanza de las NOCHES DE LOS REYES MAGOS delegando nuestra "SALVACIÓN" a púlpitos o declaraciones de Renta.

Despertar al conocimiento puede suponer un horizonte de potenciación del talento y, por supuesto, de crecimiento de la sociedad.

TEXTOS PARA EL ALMA 427

     


La risa conecta directamente con tu ser. Es imposible estar con tu ego y reírte y a la iglesia le interesaba más que estuvieras sumergido contigo en la profundidad de tu angustioso ego que de encontrar tu ser. Desde ahí se ofrecían como única alternativa hacia la vida eterna y la paz... De esta forma bloqueaban cualquier atisbo de conexión con tu ser, apropiándose la iglesia de este.
.¡¡¡ Ríe !!!


¡¡¡ NADA ES COMO QUEREMOS !!!


¿Das más que recibes?

Entregados y egoístas; altruistas y cicateros; cada uno tenemos un papel a la hora de dar y de recibir. Conocerlo bien es clave para el éxito


Aunque dar y recibir son dos aspectos de la interacción humana que deberían estar en armonía, lo cierto es que hay personas más propensas a dar a los demás y otras que reciben mucho más de lo que ofrecen. Sin embargo, no siempre somos conscientes del rol que desempeñamos, ni sabemos identificar cuál es la tónica de los demás.
En su libro Dar y recibir, Adam Grant, profesor de la escuela de negocios Wharton School, en Estados Unidos, estudia este aspecto fundamental del intercambio entre seres humanos y revela unos resultados sorprendentes.
Grant, que además de docente es psicólogo, clasifica a las personas en función de cómo se relacionan con su entorno.
Donantes. Son aquellos que dan por sistema a los demás, en muchos casos para obtener su cariño y aprecio. Este grupo se divide a su vez en dos subgrupos que se analizarán más adelante.
Receptores. Son los que reciben los favores del resto, ya se trate de dinero o de tiempo, y lo hacen en una cantidad notablemente superior a lo que devuelven.
Equilibradores. Buscan una armonía entre lo que aportan y lo que obtienen, y están atentos a las interacciones según este criterio. No es la tipología más común.
Falsos donantes. Bajo una máscara de generosidad, su estrategia es dar uno y quitar diez. Suponen una amenaza mayor que los donantes porque actúan de manera encubierta.
Un primer paso para darse cuenta de cómo son nuestras relaciones con los otros sería identificar nuestro papel entre estos cuatro grupos y, acto seguido, tomar conciencia de qué tipo de personas nos rodean.

Dos adictos que se necesitan

Henry Miller, novelista norteamericano que vivió de forma bohemia en la Europa en los años treinta, logró llevar adelante su sueño de escritor durmiendo en casas de amigos y subsistiendo a base de préstamos que no devolvía. El autor de Trópico de Cáncer, entre otras obras de inspiración biográfica, decía que para que se pueda establecer una relación asimétrica de este tipo “se necesitan dos enfermos: el adicto a pedir y el adicto a dar”. Sin uno no puede existir el otro, ya que ambos alimentan así sus carencias.
Sin duda, cualquiera ha ejercido alguna vez el papel de donante y ha ayudado a receptores que a menudo no dan ni las gracias. En su best seller, Grant les define a estos últimos de la siguiente forma:
“Los receptores tienen un rasgo característico: les gusta obtener más de lo que reciben. Inclinan la reciprocidad a su favor y ponen sus intereses por delante de las necesidades de los demás. Creen que el mundo es un lugar competitivo, una auténtica jungla donde los unos devoran a los otros. Piensan que para alcanzar el éxito tienen que ser mejores que el resto. Para demostrar su valía, se promocionan a sí mismos y procuran que sus esfuerzos reciban los elogios que se merecen. No son crueles ni despiadados; son simplemente cautos y poseen un gran instinto de autoprotección. “Si no pienso en mí y me pongo por encima de todo lo demás”, piensan, “nadie lo hará por mí”.
Curiosamente, los receptores no siempre llegan a los puestos más altos de sus estructuras, como menciona Grant en un estudio estadístico realizado por expertos en ciencias sociales. La primera conclusión de esta investigación es que los donantes suelen ocupar la parte más baja del escalafón en todas las profesiones. Quien se ocupa de darlo todo es, lógicamente, quien menos dinero tiene y raramente alcanza puestos de responsabilidad. En la punta de la pirámide del éxito, sin embargo, no están ni receptores ni equilibradores.
Así como los donantes están instalados en la parte baja de la pirámide, los otros dos grupos ocuparían un lugar intermedio. Entonces, ¿quién reside en la cúspide?
Nuevamente los donantes.
¿Pero cómo es posible? ¿No habíamos quedado en que los que ceden ocupan la parte inferior de la tabla? La respuesta es: sí, pero se trata de cierto tipo de donantes cuya generosidad les ayuda a alcanzar el éxito.
Para entender por qué hay una clase de donantes en el escalafón más bajo y otra distinta en lo más alto de la pirámide, hay que analizar cómo funciona cada subespecie.
Donantes estrella. Son aquellas personas con criterio para gestionar su generosidad de forma inteligente. Saben cuándo dar, con quién, cómo y a cambio de qué. Pertenecen a esta categoría los inversores que apuestan por una start-up y ven multiplicados sus ingresos, los que cultivan relaciones que les reportan contactos beneficiosos, o los que realizan donaciones a cambio de prestigio social para ellos o para su marca.
Felpudos. Este término acuñado por Grant define a los que dan indiscriminadamente, de manera que su actitud se toma como una enfermedad, algo que necesitan hacer para sentirse bien. Su entorno se acostumbra a la generosidad permanente hasta el punto de que sus donaciones dejan de ser valoradas. Al contrario, si un día no dan algo, entonces son señalados como seres crueles e injustos. El apelativo “felpudo” encaja bien en este perfil, ya que al final todo el mundo les pisa.
La diferencia básica entre ambas clases es que los felpudos establecen relaciones asimétricas, mientras que los donantes estrella obtienen beneficios, aunque sea a medio o largo plazo, de su generosidad. En palabras del escritor de libros de autoayuda Stephen Covey, estos últimos operan desde el win-win, es decir, son capaces de establecer relaciones en las que todos ganan.

Esta obra que ha estado en las listas de The Financial Times y de The Wall Street Journal es un ensayo que, además de clarificar los tipos de relaciones que promovemos, aporta una visión optimista para transformar la generosidad enfermiza en vínculos enriquecedores que impulsen el bien de todos.

Para tener una relación saludable con el mundo no hay que señalar culpables. Ni siquiera se puede hablar de buenos y malos, dado que la mayoría de personas no son conscientes de qué rol ejercen, sino de las decisiones acertadas o equivocadas que parten de uno mismo.
Como dice la sabiduría popular, cada uno es “responsable de lo que le sucede”, ya que cada actitud tendrá un impacto en el comportamiento del otro. Por tanto, el primer paso para sanar la adicción a dar es asumir que se está desempeñando ese papel sin ver compensación alguna, como sería el caso del donante estrella. Hay una serie de medidas que se pueden tomar para lograr unas relaciones más justas y saludables.
Saber qué nos impulsa a ceder. ¿Por qué entregamos lo mejor que tenemos a todo el mundo constantemente? En palabras de Antoni Bolinches, “el origen suele estar en una falta de amor en la infancia. Las personas que han recibido poca atención de su padre o de su madre cuando eran niños, de adultos buscarán el amor en todo el mundo e intentarán comprarlo a través de una entrega enfermiza”.
Detectar a los vampiros. Si hay receptores en el entorno que no paran de exigir, hay que saber apartarse de ellos a tiempo y frecuentar otro tipo de compañías.
Esperar la ayuda. Aunque sorprenda, la inmensa mayoría de las donaciones se llevan a cabo a propuesta del donante, que ofrece su dinero, su tiempo o sus contactos para ser útil. Si ayudamos solo a quien lo pide expresamente, habremos eliminado ya hasta un 90% de las donaciones.
Dar a quien lo merece y necesita. El ­último paso en este proceso curativo sería elegir bien a quién damos. La primera pregunta que debemos plantearnos es si nuestra relación con el receptor justifica la donación. En segundo lugar, plantearnos si nuestra ayuda es realmente necesaria, o bien la persona puede procurarse lo que reclama por sus propios medios.
De lo que se trata, al final, es de establecer relaciones justas con los demás y con uno mismo, y de que cada persona asuma sus responsabilidades. Llegados a este punto, ya no hablaremos de dar y recibir, sino de compartir la vida con toda su riqueza.

TEXTOS PARA EL ALMA 426


"Sin dudar" 
Tengo el firme convencimiento de que la mayoría de los adultos no sabe cuáles son sus talentos ni sus habilidades innatas. Y esto nos ocurre porque el talento suele estar marginado, no nos hemos ocupado por él al estar socializados en el TENER ignorando el SER.


TEXTOS PARA EL ALMA 425



Felicidad 

Es la que tiene un niño cuando, desde su inocencia, descubre el mundo. A medida que vamos creciendo en nuestro "teatro de las sombras" vamos conociendo la miseria humana. El humano vive "encarcelado" en la celda de su YO y desde ese pulpito construye su fantasía a la que llama realidad