Desde
tu muda presencia, Emancipación, me influyes para que note tu existencia sin
verte.
Permanentemente nos
llamas a todos para darnos a conocer el gozo de tu existencia que reclama el
abandono de nuestro egoísmo.
Desde esa humildad
nos haces comprender que tu docta bondad nos ayuda diariamente a desvelar el
misterio de nuestra existencia mas allá del banal sufrimiento.
Así, como pajarillos
heridos y sin protección, vamos desvaneciéndonos sin destino ni horizonte
satisfaciendo, simplemente, las demandas de la carne.
Crucificados entre
los cuatro puntos cardinales estamos en la "cultura de la pereza"
entretenidos por la televisión y la soberbia.
Emancipación estamos
como aves caídas del nido sin otra razón de SER que el TENER. Practica
con nosotros una acción "transformadora" que nos permita abandonar
los cuidados "paliativos" donde la comodidad nos ha instalado.
0 comentarios:
Publicar un comentario