"Las palabras vuelan, los ejemplos arrastran"
Vivir en la denominada "última generación" de cualquier actividad humana, requiere un esfuerzo de evolución.
Los que están en este estadio por primera vez aprenden de la última versión, más para entenderlas deberían conocer su origen.
Aquellos que ya hemos conocido distintas versiones de un mismo concepto tenemos la necesidad de actualizarnos para no perder vigencia social con el recién llegado.
Tal proceso también pasa con las ideas y los postulados de la Emancipación. Las generaciones humanas crecen más formadas en el concepto, si además de lo material buscan algo con mayor densidad intelectual.
Las generaciones nuevas formadas en el espíritu plural, demandarán formar parte de los flujos de conocimiento que los tiempos presentan.
Por poner un ejemplo, hoy día ya vemos como a una camarera, el mercado, le demanda conocimientos de dietética y a un profesional e retael textil, le exigen manejarse con conceptos de marketing personal.
Así, aquellos que han alcanzado la veteranía, tienen por delante un buen reto; divulgar los valores y el origen de las cosas y adaptarse a la interpretación que, de ellas, hacen las nuevas generaciones.
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