"la conciencia personal es la molécula
de nuestra identidad"
El Círculo Vistuoso de la convivencia humana
lo componen la palabra y la escucha atenta.
El humano para desplegar todo su potencial de
talento no tiene más solución que ubicarse en éste
circulo virtuoso para discernir su existencia y la
de los demás.
A través de la palabra puede desmenuzar los conceptos
y matices que determina su universo interior.
Así la palabra da forma al espíritu conformando un ser
inmaterial que nos caracteriza como especie. Aunque
suene a paradoja, el silencio es la antesala de la
palabra pues ésta debe ser medida y ponderada.
Esa palabra, bien dicha, no debe ofender a quién la
escucha y por ello precisa del silencio previo para
reflexionar antes que hablar.
Recordamos, empero, que aquellas que no
escuchan ni hablan de forma comedida, puede
originarse por autosuficiencia, miedo o por enfermedad
emocional no reconocida.
"Todos somos gente"
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