Sigue adelante
No llores por lo que
perdiste, lucha por lo que
te queda.
Lo mejor para el prójimo,
debe ser el reto permanente que
empuje nuestra voluntad.
Con más frecuencia de la deseada,
este objetivo va en contra de nuestros
intereses ya que vivimos bajo
los dictados del ego.
La vida del humano, tal como
nos han enseñado, es solo
una crónica aséptica de
acontecimientos carentes
de profundidad existencial...
y no, no debe ser así.
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