"La Emancipación te libera del descarte que te ofrecen "los otros"
¿ Y
ahora qué?
En nuestro estadio permanente de satisfacer el deseo vamos
consumiendo etapas de tan banal carrera hacia el absurdo. Con cada una de ellas
conseguimos acuñar otra "etiqueta estéril" en nuestra andadura por la
soberbia ignorancia, que nos acompaña en nuestra pasarela de la vanidad. Cuando
terminamos el festín consumista nos preguntamos...¿y ahora que toca? La ruta
del deseo puede contemplar poseer un marido (no un amor), unos hijos (que se
parezcan a mi), un piso y/o casa en propiedad (más aparente que él, la de mis
amigas, amigos), una soleada y ventilada propiedad veraniega (con piscina de
ser posible), unas amistades con éxito social (en cuya constelación practicar
el nepotismo), un trabajo aparente y bien retribuido (en donde recibir los
frutos de las "relaciones") y sobre todo una "cosmética red
social" que me permita burlar el verdadero compromiso conmigo misma. ¿y
ahora qué? Púes toca cambiar la titularidad de todo lo descrito especialmente
para frenar la evolución. Pareja nueva, casa nueva, amistades nuevas para que
se rían con los mismos chistes de siempre, consumo nuevo y mentiras más
ingeniosas para parecer más inteligente. ¿y ahora qué? Pues quizá corresponda
reconocer la falacia de tu existencia, la brecha entre tu SER real y tu
egocentrista ego adquirido, que tantos sin sabores te ha ofrecido. Puede que,
ahora toque, amar y ser amada por quién acepte lo peor de tus virtudes y lo más
intenso de tus defectos.; eso sí sin esperar nada a cambio. Y este es el ciclo
hasta que preguntándote ¿ahora qué? te desplaces hacia la eternidad.
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