El humano es un ser biológico al par que un individuo social pero la distinción no siempre es tan simple.: a menudo los estímulos psicobiológicos y el estímulo psicosocial provocan reacciones del mismo tipo y puede preguntarse si el miedo del niño en la oscuridad se explica como manifestación de su naturaleza animal o como resultado de los cuentos de su madre. ¿Dónde termina la naturaleza? ¿Dónde comienza la cultura?
El métido más simple, para contestar a esta pregunta, consistiría en aislar a un reción nacido y observar sus reacciones frente a distintas excitaciones las primeras horas o días que siguen al nacimiento. Podría suponense, entonces, que las respuestas obtenidas en tales condiciones son de origen psicobiológico y no corresponden a síntesis culturales posteriores.
Más que los fracasos frente a pruebas precisas, una comprobación de orden general nos convence y nos hace penetrar más hondo en el núcleo del problema. Se trata de la imposibilidad de extraer conclusiones generales a partir de la experiencia. La vida social de los monos no se presta a la formulación de norma alguna. En presencia del macho o de la hembra, del animal vivo o muerto, del sujeto joven o adulto, del pariente o delo extraño el mono se comporta con una versabilidad sorprendente. No sólo el comportamiento del mismo indoviduo es inconstante, sino que tampoco colectivo ùede encontrarse ninguna regularidad. ¿entonces?
C.Lévi-Strauss
2 comentarios:
Paco paso a saludarte y decirte que siempre tus entradas me ayudan, a comprender, a preguntar, a responder.
Gracias por ello.
Un abrazo.
Claro que ayuda
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