Gallinas en libertad
No me atrevo a definir si
somos humanos de corral o "picoteamos" en semilibertad.
Cuando hoy en día,
en mi territorio natal, los "encargados administrativos" insisten e
insisten en indicarme como tengo que "amar las cosas" entiendo me
encuentro en una libertad aparente y semi programada.
Desde hace mucho
tiempo, aprendí que la libertad se alcanza cuando respeta al prójimo como a sí
mismo y ponemos todo nuestro talento, no en enfrentarnos sino en comprendernos.
Bien pues esos "capataces con traje" nos despiertan el odio, la
vanidad y la venganza como si fuéramos aves de pelea que con la muerte los
distrae.
Nos hemos liberado
del "gendarme" militar que se adueñó del gallinero durante 40 años
para pasar a las manos de nuevas versiones de poder como son los
"capataces administrativos" que mediante un aparente victimismo se
adueñan del "territori".
Para qué? no
podemos amar según cada corazón.
¿para qué nos
imponen su catálogo de objetos a amar?
Las denominadas comarcas y
sus ciudadanos son muy respetables más no me identifico con su modelo rural.
Cada uno tiene su apego diversificado fuera del catálogo
"convergente" que mima con esmero para fortalecer su esperanza
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