Podemos considerar la vulnerabilidda como la capacidad para poder ser herido física o moralmente. Muchas personas la consideran como una debilidad y se desarrollan ideas como "los demás están esperando a ver tu punto flaco para atacarte". Sin embargo, esta no es la única manera de ver las cosas. La vulnerabilidad, lejos de ser una debilidad, es más bien una fortaleza. Las personas que se atreven a mostrar su vulnerabilidad, a decir no sé, a pedir ayuda, son percibidas más cercanas y resulta más fácil conectarse con ellas.
Si pensamos que vulnerabilidad es igual a debilidad, tendremos más dificultad para mostrar nuestras carencias y nos costará más aceptar que no sabemos acerca de algún tema o que necesitamos ayuda de los demás. Incluso las expresiones de gratitud nos resultan difíciles, porque dar las gracias implica siempre un cierto exponerse.
Si pensamos que vulnerabilidad es igual a fortaleza, tendremos más facilidad para aceptar nuestras limitaciones y carencias, y esto nos permitirá pedir ayuda, aceptar que todos somos ignorantes aunque no de las mismas cosas. Si la consideramos una debilidad estaremos más cerrados al aprendizaje. Si la consideramos una fortaleza no necesitaremos enconder nuestros errores, los afrontaremos con humildad y desde ella, con esperanza de mejora.
¡¡¡qué bien, YO también soy vulnerable!!!
4 comentarios:
Me ha gustado especialmente esa entrada, Paco.
Especialmente.
Un abrazo.
Muy buena la entrada.
Yo siempre he sido bastante vunerable y ahora me doy cuenta que no me ha ido tan mal, cuando lo miro desde este nuevo punto de vista.
Gracias
Que bonito lo que expresa Pablo Neruda.
Totalmente de acuerdo con todos los razonamientos que has expuesto y no a la casualidad y sí a la causalidad y la ley del Karma, aunque no lo veamos en esta vida.....
un abrazo querido amigo.
"Aceptar nuestra vulnerabilidad en lugar de tratar de ocultarla es la mejor manera de adaptarse a la realidad". David Viscott
Publicar un comentario